Estabilidad inestable

Por Ricardo Correa Robledo 

¿Podría haber titulado esta columna ‘Inestabilidad estable’? creo que no, pues hay diferencia en los conceptos, siendo más acorde con la realidad el escogido, y por fortuna más benévolo.

Dos hechos de hace dos días dan luces sobre lo que podríamos denominar ‘el estado de la nación’, parafraseando a la reciente intervención de Biden ante el congreso de Estados Unidos y que parece le da una buena dosis de oxígeno en su campaña para la reelección, que por el bien del mundo entero ojalá gane.

El primero fue la elección como fiscal de la abogada penalista, por fin un penalista con sobrada experiencia en el oficio, Luz Adriana Camargo.

El proceso que pudo haberse tornado tortuoso se surtió mucho más rápido que en otras ocasiones y sin que puedan surgir suspicacias sobre el mismo. La Corte Suprema actuó como lo indica la Constitución.

No hay en el pasado de la fiscal electa máculas ni intereses que generen impedimentos, como ha sucedido con anteriores fiscales generales. ¿Que trabajó con el hoy ministro Iván Velásquez en la comisión contra la corrupción en Guatemala? Pensar que esto la inhabilita para el nuevo cargo es hilar demasiado delgado y con exceso de prevención. Y en este asunto hay que reconocerle al presidente Petro que presentó una buena terna, con tres abogadas competentes y respetables; y lo más importante, que ninguna de ellas se anticipaba como apéndice del gobierno.

Lo que viene ahora es que la fiscal Camargo demuestre desde su cargo sus capacidades y su probidad. Ah, sin duda vendrá ruido, como por ejemplo la interpretación jurídica de la renuncia a la terna que hiciera Amelia Pérez minutos antes de la elección, lo que sin duda abordará el Consejo de Estado ante previsible demanda. Pero todo parece estar finiquitado.

El mismo día se dio un hecho que puede llegar a constituirse en uno de los más importantes y definitivos en lo que será el período de gobierno de Petro: la radicación de ponencia negativa a la reforma al sistema de salud por parte de 8 senadores en la comisión séptima del Senado. Si bien la votación se pospuso para después de Semana Santa y cosas pueden pasar de aquí a allá, es casi imposible revivir la reforma del gobierno.

Una votación en el sentido de la ponencia pondría un punto final al más polémico de los proyectos del gobierno Petro. Ante la noticia el Presidente ha dado, como de costumbre, altisonantes declaraciones con tufo de amenaza, pues entre líneas deja entrever que boicotearía el actual sistema. Ojalá tenga claro que actuar así sería casi que criminal, pues sería indolente ante la salud y la vida de 50 millones de personas.

Pero gobierno es gobierno en cualquier parte y tiene el poder de moverlo todo en la sociedad y el Estado. El Presidente y algunos de sus ministros seguirán saliendo con perlas que prenderán las alarmas y obligarán a que las otras ramas del poder público y los actores decisivos de la sociedad civil actúen con prontitud y pertinencia en la contención.

En cuanto a clientelismo, corrupción y desatinos, este gobierno sí ha sido continuista, pues todos han tenido también sus carrotanques para calmar la sed que no actúan, sus olmedos López, lauras Sarabia, alexander López y gustavos Bolívar.

*************************

NOTA MUSICAL: murió en Estados Unidos el gran músico Pete Rodríguez, pionero del Boogaloo; y si al lector este nombre no le resuena, el solo mencionar la canción ‘Micaela’ le dirá todo.

Nacido en el Bronx en 1932, hace parte de ese puñado de virtuosos jóvenes latinos que crearon en la década de los 60 una música que resumía lo mejor del Caribe con influjos de las tendencias más fuertes de Estados Unidos y que luego se llamó Salsa.

El Boogaloo, variante salsera, fue una mezcla de los ritmos cubanos con el Soul, Blues y Góspel. Rodríguez es otro más de los grandes de la Salsa que se va, pero muchos lo seguiremos escuchando con deleite, y algunos bailando, pues su música es desafiante para el bailador.

El siguiente video es un manjar musical y visual, los invito a verlo:

En YouTube buscar ‘I like it like that Fania’