El empresariado paisa humillado y difamado por Quintero, debe despertar

Por Gabriel Dib 

 El que calla otorga, este mensaje va dirigido a los presidentes, accionistas y empleados de nuestras empresas orgullo de ciudad y país.  

Si no despiertan pasará lo de Chile, Argentina o Venezuela, perderemos el país. Deben demostrar con hechos y no con aguas tibias y comunicados “respetuosos” su amor por Medellín y la defensa de lo nuestro.  

¿Necesita alguien algún argumento más para revocar a este alcalde populista y sofista? ¿Manipulador de lo social y caudillo de personas confundidas en la historia del país? Les pido desde lo más profundo de mi corazón que se pellizquen, que salgan a la calle, que expliquen por qué el alcalde no es bueno para la ciudad.  

Este alcalde ataca a diestra y siniestra, esto no es de uribistas o fajardistas o del GEA (para él todo lo que lo contradiga es malo y lo llama GEA, ni lo conoce y posiblemente ya ni existe). Esto es de personas honestas que amamos a Medellín contra un libreto populista que desea un cambio, pero para mal en el país, un cambio hacia mayor corrupción y poner la bandera del comunismo fracasado con un pseudo caudillo llamado “piedra” en italiano pues ni su nombre es colombiano.  

Un señor que ha hecho todo lo ilegal visible o no en el país y contra el país, y no entiendo cómo hay muchos que lo apoyan. De verdad, si no salvamos a Medellín perdemos el país.  

A los medios de comunicación, les pido imparcialidad, pero veracidad histórica, que sean justos con la noticia y abandonen el rating que se comprometan como seres humanos con la verdad. Medios sin mermelada, medios que respeten la diversidad. 

Nuestros hijos merecen padres berracos, honestos, comprometidos. Que seamos incluyentes, que oigamos al triste y desvalido, que protejamos los recursos de todos, que defendamos la equidad de género, que seamos ecológicos por amor genuino a nuestra tierra. 

No necesitamos politiqueros que solo busquen votos y después traicionen sus propuestas. Como dije al principio este mensaje, va dirigido a todos aquellos que aman Medellín, que crecimos y nos hicimos acá, a aquellos que dirigen las compañías que nos han hecho una ciudad envidiable y hermosa.  

Defiendan al GEA, a EPM, a la universidad con su libre pensamiento. Defendamos lo correcto. Este alcalde ha destrozado parte de los cimientos de nuestra cultura paisa, ha importado de la capital esas mañas clientelistas y nepotistas. Tiene la chequera de la ciudad y no se va a dejar mover, así son los tiranos como maduro, Chávez, Castro, los Kirshner… Usan la chequera para atornillarse y no para ayudar al pueblo y a la gente humilde.  

Escribo indignado, preocupado, pero con el corazón. 

Quiero ver a los presidentes de compañías que llevo grabadas en mí, no por ser accionista sino porque sé cómo sudan la camiseta para ayudar a la gente paisa y de Colombia. Sura, Nutresa, Noel, Corbeta, chocolates, Argos, Bancolombia, Haceb, el machetico como emblema de todos los luchadores, entre miles y menos famosas, Postobón, clínicas y hospitales públicos y privados, universidades.  

¿No les parece que llegó la hora de demostrar a quien pertenece Medellín?  

Este alcalde no sabe qué es Medellín. Solamente paga favores y es brillante con su discurso populista.  

Casi quiebra a Hidroituango para traer a los chinos, al consorcio que trabaja para EPM en Hidroituango tan insultado, conozco a sus directores gente honesta y luchadora, por generaciones, no permitan más insultos, ni permitan que los llamen deshonestos o cómplices de malos manejos.  

Defendamos nuestro nombre, piensen en sus padres y en sus hijos, en su reputación. Si el alcalde tiene a todos sus secretarios usando recursos públicos para defenderlo, pues saquemos los nuestros, pocos o muchos, no para defender a ningún político sino para defender nuestra ciudad.  

Es ahora o nunca, si la revocatoria no pasa, con el dolor en el alma el señor “piedra” será presidente de esta patria hermosa. No tengo la menor duda.  

¡Así que empresarios y amigos, llegó la hora de la verdad! Pellizquémonos. 

Pd: Todas las opiniones de este mensaje son 100% personales y las he escrito con el corazón, como ciudadano, como médico, como profesor, como padre. No como político. Prefiero que me recuerden como un buen médico y no como un buen político.