28 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Crónica # 553 del maestro Gardeazábal: nos quitarán las motos

 

Songo sorongo este país ha dejado crecer el problema del transporte público. 

Al modelo de Curitiba, que nos impuso Peñalosa con Trasmilenio, le salieron hijitos mal nacidos en otras partes y hoy en día millones de bogotanos prefieren viajar en moto o apretujarse sin pagar en los carromatos del TM.  

Al Metro de Medellín no le han salido ni hijos naturales porque no se hizo subterráneo. A Cali le cambiaron la propuesta del tren ligero con alimentadores por un embeleco llamado MIO que está agonizando desde cuando nació hace 20 años.  

A Barranquilla acaban de injertarle un híbrido, el Sibus, que organiza digitalmente la chorramenta de buses y busetas. Y en Bucaramanga llevan años haciendo riachuelos viales exprimentales para bicicletas (¿y quizás motos?) aumentando los trancones.  

Mientras tanto los pasajeros se han bajado de los transportes masivos y hasta en Medellín, que tiene un Metro que funciona, abundan los que prefieren ir en moto. Son más expeditas para transportarse, baratas y financiadas para no aporrear ningún bolsillo.  

Pero como las vías las transformaron en las grandes ciudades para darle preferencia a esos sistemas de transporte masivo fracasados, quedaron estrechísimas para los vehículos de dos y cuatro ruedas y hoy son un dolor de cabeza para las grandes ciudades.  

Sobre el tema han hablado y escrito distintos sabios de la economía. Sobre las ventajas de hacer el subterráneo en Bogotá y no el elevado, no han podido ponerse de acuerdo ni Petro ni la alcaldesa, ni los chinos, menos los transportadores. Y como a los pasajeros no les preguntan, sino que les hacen sufrir las consecuencias, el malestar crece hasta que vaya y nos pase lo de Santiago de Chile. 

 La semana pasada el economista Mauricio Cabrera, miembro de la Junta Directiva de Ecopetrol, escribió un artículo sensatamente pivoteado pero concluido muy al estilo de los sabios que nos jodieron y como Petro le oye, Cabrera le está recomendando que tome medidas para que no haya más motos y los transmilenios no se quiebren. 

Escuche al maestro Gustavo Alvarez Gardeazábal

¿Habrán pensado la magnitud de la provocación social que están aconsejando?