26 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Colombia reclama unidad nacional

Carlos Mario Restrepo

Por Carlos Mario Restrepo Tamayo

El colombiano en su editorial del 23 de marzo «Petro con Proantioquia», en buena hora se pronunció sobre este importante encuentro y destacó las coincidencias que se presentaron entre los voceros de los empresarios y el presidente Petro, para establecer líneas de diálogo.

Para los empresarios no existe incompatibilidad alguna entre el progreso social y el éxito de las empresas, componente que ha caracterizado el desarrollo de las empresas antioqueñas.

El presidente Gustavo Petro por su parte tomó la palabra y les soltó esta frase: «El diálogo está abierto».

Este ejemplo lo deberían poner en práctica todos los gremios individualmente y en forma conjunta a través del Consejo Intergremial.

Es hora que todos los colombianos nos unamos y aportemos para construir un mejor país para todas las clases sociales sin egoísmos, donde haya espacio y oportunidades para todos.

El Presidente Gustavo Petro y todos sus ministros tienen que entender que ya no están en campaña, que tienen una gran responsabilidad, que no pueden ser sordos al clamor de sus gentes, lo que se demuestra en el incremento en su desfavorabilidad, según las últimas encuestas.

El presidente Petro debe honrar su palabra y abrir el espacio y su mente a un diálogo sincero, sin odios ni revanchismos, sin ser el poseedor de la verdad absoluta ni el único en tener las alternativas de solución.

Debe el presidente Petro escuchar en este diálogo el descontento generalizado que existe con muchos jefes de sus carteras por su incompetencia, al igual que con el contenido y la oportunidad de las reformas que cursan en el Congreso.

Todos los colombianos queremos que a usted, señor presidente, le vaya muy bien. Nadie está tratando de quitarle su puesto. Por favor no se empecine en actuar en solitario y en contravía de lo que quiere el país. Póngale sentido común y sintonícese con el clamor de este pueblo, de gente buena y trabajadora: Motive, genere seguridad y estabilidad entre los empresarios para que se animen a crear nuevos puestos de trabajo. Cumpla con su juramento respetando la Constitución y la ley, velar porque las autoridades institucionales cumplan a cabalidad con sus obligaciones protegiendo la vida, honra y bienes de todos los colombianos, sin importar el color o ideología política.

Es hora también que los medios de comunicación actúen con nobleza patriótica, se reivindiquen ante la opinión nacional y con un periodismo crítico y constructivo, contribuyan a fortalecer esta democracia y nuestras instituciones.

Aún estamos a tiempo. Mañana de pronto será demasiado tarde. Los congresistas como actores importantísimos de nuestra democracia, tienen hoy más que nunca la más trascendental responsabilidad en sus manos. Deben actuar en conciencia, como lo haría un buen padre pensando en el bienestar de sus hijos y de toda su familia.

Y lo mismo, los jefes de los partidos políticos, quienes deben orientar sus colectividades hacia una verdadera vocación de servicio a la comunidad, por encima de los intereses burocráticos que solo buscan alimentar sus bolsillos, sin pensar en los colombianos que los eligieron.

Este momento histórico del país necesita del compromiso de todos, unidos en un solo propósito para no perder nuestra democracia. Porque nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde.