3 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Bobo de la yuca

Por Carlos Alberto Ospina M. (foto)

Algunos políticos y otras especies que, ejercen cargos de representación o elección popular, creen que la gente es tonta. En el último año de alcaldías y gobernaciones sacan toda la artillería mediática y el maquillaje para presentarse como prohombres.

Con astucia, diría, deshonestidad, dejan para el último año de gobierno las obras que produzcan más ruido, reconocimiento general, aumento de la imagen “positiva” y aplausos de la galería. El circo, en cabeza de las oficinas de prensa y comunicaciones, levanta la carpa del espectáculo de condecoraciones inmerecidas, la movida del catre, la aparente sensibilización social y la táctica de tapen, tapen, también huecos. Nada más lejos de la existencia real que la exagerada ponderación del perfil de un funcionario que, no está para agradecerle las “gestas”, tan solo para que cumpla a cabalidad el deber; al fin y al cabo, es un empleado pagado con nuestros impuestos. Sáquense de la cabeza que este tipo de personaje nos hace un favor o efectúa una labor altruista. Su compromiso es rendir cuentas en relación con el correcto manejo de los recursos públicos; en lugar de utilizarlos para provecho propio con miras al ascenso en la distribución del poder. ¡Pare de contar! La probidad dista mucho de la transparencia en el ejercicio gubernamental.

La mayoría de gobernantes son caraduras. Dentro de las estrategias de divulgación camaleónicas presentan informes institucionales a manera de noticias. Escabrosos, los áulicos de los canales regionales y locales; los medios audiovisuales e impresos, y las redes sociales pagadas con el sudor del hombre de a pie. Así, diseñan innumerables mensajes bajo la sombrilla de la pauta publicitaria oficial, la cual fue asignada meses antes de entrar en vigencia la Ley de Garantías electorales. Dicho y hecho, esa norma es inútil frente a la capacidad de simular limpidez en los distintos procesos de adjudicación o “invitación a participar”.

Más de uno pasó de agache; en particular, el alcalde de Medellín, Federico Andrés Gutiérrez Zuluaga, proclive a tratar de “bobo” a un vándalo del espacio público y tan mentecato para meter los dedos en la boca de los ciudadanos al encubrir un contrato estándar de pauta publicitaria por $1.427 millones de pesos suscrito por Telemedellín con Discovery. Con bombos y platillos anunció en rueda de prensa que la capital antioqueña había sido seleccionada como “Ciudad Discovery”. Gutiérrez Zuluaga mintió de pe a pa. El municipio pagó por esa franquicia promocional. Este comportamiento impúdico amerita apertura de investigación por parte de la Procuraduría.

El decreto 1082 del 26 de mayo de 2015 «Por medio del cual se expide el decreto único reglamentario del sector administrativo de Planeación nacional» es explícito en cuanto a los mecanismos para manejar las ofertas artificialmente bajas. El pasado 4 de abril de 2019, el Secretario de Suministros y Servicios de la Alcaldía de Medellín, José Nicolás Ríos Correa, adjudicó el Proceso de Selección abreviada por Subasta Inversa No.0009013126, “cuyo objeto es el servicio de mantenimiento preventivo y/o correctivo, con suministro de repuestos e insumos para motocicletas del parque automotor” por valor inicial de QUINIENTOS MILLONES DE PESOS M/L ($500.000.000) incluido IVA. (Resolución Número SSS2019500037249 – 4 de abril de 2019, Cód.FO-ADQU049). En los considerandos de dicha resolución hay varias perlas por lo que corresponde a la desagregación y el análisis de precio/costo; la estructura del proponente y el mecanismo de aclaración de los importes ofrecidos; entre otros requisitos de ley que ponen en riesgo la ejecución del contrato. Más grave aún, estamos en presencia de un posible caso de precio artificialmente bajo. (Léase Guía para el manejo de ofertas artificialmente bajas en Procesos de Contratación – https://www.colombiacompra.gov.co/sites/cce_public/files/cce_documents/cce_guia_elaboracion_estudios.pdf).

Al respecto, la administración de Federico Gutiérrez, como quien no quiere la cosa, abre el espacio a posteriores investigaciones de los organismos de control y vigilancia, a partir del ítem 12 de la Resolución Número SSS2019500037249 – 4 de abril de 2019, Cód.FO-ADQU049, que reza así:

“…en el evento de subasta la empresa MUNDO MOTORRAD S.A.S., con NIT 900910573-8, ofertó el mayor porcentaje en la subasta, correspondiente a un descuento del 90%; (el subrayado y la negrilla es mío) que según el anexo de “Resumen Económico” se debe calcular así: Del porcentaje ofrecido el 70% sería el valor de los repuestos, listados entregado por los representantes legales de cada marca; que para el presente caso corresponde a un equivalente a un 63%; y el ofrecimiento que comprende el 30% de la ponderación para la mano de obra, equivalente para el caso concreto de la oferta a un 27% sobre el valor de la mano de obra”. (Resolución Número SSS2019500037249 – 4 de abril de 2019, página 5, Cód.FO-ADQU049). No obstante, la pésima redacción del mencionado acto administrativo, ¿Es necesario detallar los hechos fácticos en este caso específico? “¡Ahí es un grano de anís!” queda la tarea de mirar en puntos cientos de adjudicaciones y contratos; por ejemplo, la supuesta posición privilegiada de una agencia de publicidad en contraste con otras similares que no alcanzan la calificación de méritos e idoneidad. Así mismo, el desperdicio de papel con la impresión del impuesto predial unificadoque, contradictoriamente, se entrega un documento de cobro por cada inmueble. Casa de locos.

¡Qué perfectos e incontaminados se ven! Inaugurando obras a granel y anunciando insípidas primicias. ¿Recuerdan la aceleración de las obras de Hidroituango y el túnel de oriente en Antioquia? En este último año de mandato diferentes alcaldes, gobernadores, concejales y diputados parecen en gira de conciertos. No falta el bobo de la yuca que entone “vanidad de vanidades” y crea que, con ellos, nace el sol. En realidad de verdad están cortados con la misma tijera. Con razón se autodenominan “el de…”, sí, jodarria.

Enfoque crítico – pie de página. El medio ambiente y la movilidad en Medellín siguen más la moda que el criterio. En distintos sectores de la ciudad, las grandes aceras sustituyeron las vías de acceso a los barrios, aumentando los niveles de ruido, contaminación y congestión vial, donde ayer moraba la calma y la calidad de vida.

Por copiar las grandes urbes del mundo se metieron en el embeleco del tal urbanismo táctico y señalización horizontal para, posteriormente, destruir esas obras con la construcción de ciclorutas, redes camineras, mampostería y trampas mortales que acarrearán innumerables demandas contra la Alcaldía de la capital antioqueña por concepto de responsabilidad civil y riesgo inminente. ¿Qué decir del detrimento patrimonial y la destrucción de bienes públicos? Desde la distancia y la comodidad de los despachos oficiales es muy fácil ver el panorama e ignorar el tejido actual de la ciudad.