¿Alvaro Leyva, viejo militante del M-19?

@AlvaroLeyva @petrogustavo

A raíz del rescate de El Reverbero de Juan Paz, del prólogo del libro La espada de Bolívar [Fondo Editorial ITM, 2006], donde se cuenta el aporte de $100 millones para la campaña al Senado de Álvaro Leyva en los años noventa, y que causó sensación entre los lectores de esta columna, son muchos los que se están preguntando si la militancia del Canciller de Colombia en el Eme venía de viaja data, de la época de Rosenber Pabón.

Según las infidencias del texto de Jairo Osorio, reiteradas también en otros libros suyos (las novelas Familia, de 2015, y la más reciente, La amante, de 2022), todo parece indicar que Leyva siempre fue un diplomático de civil del grupo guerrillero, aprovechando su condición de político conservador.

No hay que olvidar que la mayoría de miembros del Eme, sobre todo en Antioquia, fueron de procedencia conservadora. Osorio lo señala en algunos pasajes de sus obras testimoniales. Él mismo es sobrino de un pedagogo que fue cercano del general Rojas Pinilla y de una tía monja confidente de la nena María Eugenia.

Para corroborar las preguntas de los innumerables lectores curiosos, El Reverbero de Juan Paz acudió al prologuista, sabedor, sin duda, de otras intimidades de la época, de atenernos a la mucha información que se traduce de sus escritos, no sólo del primero de los mencionados, sino de sus posteriores publicaciones.

Quienes conocemos a Osorio sabemos que no es ningún apóstol de la ficción. Al contrario, es un cultor del verismo literario.

Sin embargo, su respuesta pareció la de un Benedetti arrepentido. “Yo no leo mis libros, es la razón por la cual no me acuerdo de lo que escribo en ellos”. Además, nos dijo, “recuerden que los escritores somos un poco mentirosos…”.

Ahora sólo nos faltará que Osorio también viaje sorpresivamente a Estambul como Armandito.