3 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

“Visitando mi tumba” 

@eljodario 

Increíble, pero cierto. Que alguien en vida visite su propia tumba o la que será su última morada. 

Lo hizo el maestro Gustavo Alvarez Gardeazábal este fin de semana, en el Cementerio Museo de San Petro, acá en Medellín. 

Vale recordar que la tumba del maestro fue inaugurada por él mismo maestro el 26 de noviembre del 2019 a las 6 de la tarde. 

El escritor tulueño y exgobernador del Valle del Cauca se dedicó varios años a preparar el sitio que será su última morada. Siempre se conoció por mucho tiempo, que su tumba estaría en el Cementerio Libre de Circasia, Quindío, pues Braulio Botero Londoño, quien fundó este panteón para librepensadores en 1932, le ofreció allí al escritor un espacio. 

Pero posteriormente la junta de ese cementerio le revocó el permiso al maestro. Finalmente, las directivas del Cementerio Museo San Pedro le ofrecieron un espacio a Gustavo Álvarez Gardeazábal para que construyera ahí su mausoleo. 

La tumba de Gardeazábal se encuentra al lado de los escritores Jorge Isaacs, y Tomás Carrasquilla. 

La escultura de la tumba Gustavo Alvarez Gardeazábal es hecha en bronce, tiene 3 metros de altura y pesa casi 300 kilos. La obra es del maestro Jorge Vélez Correa y el diseño de la arquitecta María Isabel Velásquez. 

El epitafio escogido por Gardeazábal desde hace muchos años, será “Cóndores no entierran todos los días”.