26 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Somos Seres Tech, en una sociedad Tech, de la especie homo Tech 

Por Enrique E. Batista J., Ph. D. 

https://paideianueva.blogspot.com/

Bien es sabido que cada una de las revoluciones industriales ha creado una transformación en las economías, en los modos de producción y en la naturaleza de los trabajos. En cada una de ellas ha surgido la importante consideración sobre la cualificación del recurso humano, para atender los nuevos frentes de trabajo y también la inquietud sobre el desempleo que en algunos campos producen los nuevos avances tecnológicos. Surgen, así mismo, permanentes y punzantes consideraciones, tal como ocurre hoy sobre el futuro del mundo laboral y del empleo; a la vez que se incrementa la presión para la transformación del servicio educativo, de modo que se puedan atender las necesidades formativas que requieren la variedad de nuevas ocupaciones o la rápida transformación de las existentes.  

Es bien sabido que la educación no ha respondido históricamente a los desafíos que se le presentan. No ha podido evitar estar en la cola de los nuevos avances debido a la dificultad de transformación de las prácticas educativas cotidianas, siempre enraizadas en la tradición, en añejas concepciones y creencias infundadas sobre principios insostenibles sobre la naturaleza del aprendizaje humano y los modos de promover el progreso de cada estudiante. Se agrega a esta lamentable situación, el exagerado reglamentarismo de los gobiernos que, con sus consideraciones y concepciones, también arcaicas niegan, en la práctica, la necesidad del perentorio y muy necesario cambio.  

Para el contexto de la actual revolución industrial y frente a la abierta negación a las necesidades de transformación del servicio público de la educación, con su difunto currículo, se crean dificultades para los maestros, psicólogos escolares y psicoorientadores, en los procesos que antes se denominaba orientación vocacional. El intenso uso que todos hacemos hoy de una variedad amplía de dispositivos digitales, nos muestra con claridad que toda nuestra vida, pero también todas las ocupaciones, sin excepción, tienen un componente tecnológico; es decir, que cada una y todas ellas tienen un componente «Tech». A lo cual se agrega la condición «Tech» de todos, porque usamos a diario, incluso hasta una inclemente habituación y pavorosa adicción, infinidad de dispositivos tecnológicos. (https://rb.gy/3nst78). Así, no solo somos seres digitales sino «Seres Tech», de la especie «Homo Tech». 

Por tecnología se entiende la aplicación de los principios científicos para el desarrollo de aplicaciones prácticas que mejoran la calidad de vida de los seres humanos y, hoy con presionante y urgente importancia, para preservar también la salud del planeta. (https://rb.gy/pxam0j). Entre esas tecnologías están las digitales que se expresan en diversos campos como las eléctricas, de la comunicación, computacionales, telefónicas, celulares, audiovisuales, inteligencia artificial, software, turbinas de viento, energía limpia y paneles solares, mecánicas y de manufacturas, baterías, farmacéutica, diagnósticos médicos, herramientas quirúrgicas, GPS, vuelos espaciales, vehículos autónomos y, sin falta, Internet y variedad de hardware y software. (https://rb.gy/t6arrg). [En https://rb.gy/6gv8ok se listan 77 tipos de tecnologías de la información].  

Para ser exitoso en la vida cotidiana, y en la laboral, las habilidades «Tech» se acompañan de otro conjunto de ellas que no son tecnología dura y que son fundamentales para acompañar el conocimiento tecnológico y lograr un mejor desempeño profesional, más productivo y más satisfactorio. Entre ellas: Liderazgo, adaptabilidad, cooperación, comunicación, creatividad, manejo del tiempo y priorización de tareas.  

Hoy conocemos y se presenta un conjunto de empresas, de negocios o de desempeño laboral, con el sufijo «Tech», lo cual indica, además, que se trata de un conjunto de acciones o de habilidades organizadas de una manera compleja, con frecuencia sin jerarquía discernible desde fuera de ellas.  

Presentamos algunas:  

Fintech, una de las más conocidas; la cual se refiere a la transformación disruptiva de los servicios bancarios apoyada en avances digitales. 

Proptech, que es un campo que en el pasado no era muy afín a la transformación digital; se refiere a las empresas de propiedad raíz. Paralela a ella está, por la cercanía de sus negocios y de las clientelas, la Insurtech, que comprende el campo de los seguros.  

Especialmente por el empleo de Big Data, analítica de datos y la inteligencia artificial, está el grupo de la Legaltech, con la práctica del Derecho concebida como industria corporativa, agrupando profesionales de informática y de campos complementarios del Derecho.  

La Femtech, que ha puesto énfasis en productos para mejorar la calidad de vida de las mujeres, facilitar su inclusión en empresas digitales, reducir la exclusión y la brecha entre los sexos, así como su incorporación a las ocupaciones y profesionesSTEM (Science, Technology, Engineering y Mathematics).  

La Edtech, como una disciplina independiente que: «analiza y resuelve problemas relacionados el aprendizaje, la enseñanza y la organización social, desde una perspectiva tecnológica» y, por otro lado, se refiere, entre otras, a la práctica “que tiene que ver con tecnología dispuesta o utilizada en contextos educativos». (https://rb.gy/vtqs73). La Edtech tendrá una consideración aparte en próximo escrito.  

Foodtech, que en el campo de los alimentos incorpora aplicaciones tecnológicas para la cocina, impresión 3D de alimentos, uso de las redes sociales y realidad aumentada para atraer y fidelizar clientes, empleo de asistentes virtuales para recomendaciones alimenticias personalizadas y la distribución de pedidos por solicitudes en línea.  

Greentech, referido a un conjunto de soluciones tecnológicas con modelos de negocio para minimizar el impacto ambiental de la producción en las compañías, asegurando un desarrollo sostenible y el uso eficiente de los recursos naturales, así como el empleo de energías renovables y la prevención de la contaminación ambiental. 

Healthtech, con la concurrencia y el uso avanzado de recursos tecnológicos para mejorar el cuidado de la salud, tratamiento de enfermedades y prolongación de la vida con herramientas diagnósticas y de cirugía, detectar distintos tipos de infecciones, asegurar oportunos y precisos tratamientos con inteligencia artificial, intervenciones médicas más baratas y acertadas, realizar intervenciones quirúrgicas menos invasivas y dolorosas y lograr más pronta recuperación de los enfermos. (https://rb.gy/ojxmwo). 

Más otro conjunto, ya de las habilidades «Tech» o de agrupación de oficios, ocupaciones y profesiones, que nos han convertidos enseres «Tech», insertos en una sociedad con la misma etiqueta de «Tech». 

En efecto, somos parte de la especie humana denominada «Homo Tech».