Se trata de la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca.
Bogotá.- Un informe de la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca (Ondcp, por su sigla en inglés), divulgado en junio pasado, reveló que los cultivos de coca en Colombia aumentaron el 11 % en 2017 hasta alcanzar la cifra récord de 209.000 hectáreas. La cifra había llegado a más de 170 mil hectáreas ya para el 2017.
Con este telón de fondo, el presidente de Colombia, Iván Duque (foto), y su antecesor, Juan Manuel Santos, expusieron ayer sus diferencias en la lucha contra las drogas en una audiencia en la Corte Constitucional en la que se debatieron las aspersiones aéreas con el herbicida glifosato para combatir los cultivos ilícitos.
Para el Gobierno las plantaciones de coca son un problema de “seguridad nacional” que debe enfrentarse con todas las herramientas disponibles, incluidas las aspersiones con glifosato, actualmente suspendidas. Juan Manuel Santos, quien gobernó entre 2010 y 2018 y suspendió las fumigaciones con glifosato en 2015 en acatamiento a una sentencia de la Corte Constitucional dijo a la Corte que “Colombia ha luchado contra las drogas como ningún otro país en una guerra que no se ha podido ganar en medio siglo y es una guerra fracasada o, por lo menos, destinada al fracaso. Mientras haya consumo y prohibición, habrá mafias”, dijo. EFE.
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