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La Personería considera que el exfuncionario, nombrado por Daniel Quintero, estaba presuntamente inhabilitado para posesionarse como director de Buen Comienzo.
Hugo Díaz era el director de Buen Comienzo entre enero de 2022 y abril de 2023, cuando decidió renunciar para lanzar su campaña para la Alcaldía de Bello.
La decisión la confirmó Olga Lucía Rodríguez, personera delegada 20D de Vigilancia Administrativa e Instrucción Disciplinaria, quien informó la determinación del Ministerio Público. La funcionaria indicó que la decisión se debe a que Díaz se habría posesionado como director de Buen Comienzo, pese a que pesaba sobre él una sanción de la Contraloría General de la República en un proceso de responsabilidad fiscal.
Según la información del Ministerio Público, la presunta irregularidad por la que se formulan los cargos es la de “violación del régimen de inhabilidades, establecido en la Ley 734 de 2002 Artículo 38 Numeral 4 y Parágrafo 1”. Esto, no solo por posesionarse en el cargo, sino también por permanecer en el mismo pese a la sanción de la Contraloría y a que también estaba reportado en el sistema de información de responsables fiscales.
Desde la Personería señalaron que para la fecha de posesión en Buen Comienzo, 4 de enero de 2022, Díaz Marín ya se encontraba reportado en el Sistema de Información para el Registro de Sanciones y Causas de Inhabilidad (Siri), por lo cual estaría ante una causal de inhabilidad.
Es por estos hechos que la Personería Distrital formuló el pliego de cargos y calificó la presunta falta como una falta disciplinaria de naturaleza grave con culpa gravísima.
“El disciplinado ya fue notificado y la causa continúa en el proceso de decisión disciplinaria, quien será el encargado de adelantar el juzgamiento y tomará la determinación que en derecho corresponda”, informaron desde el Ministerio Público.
Esta posible inhabilidad ya había saltado a la luz y se hizo más fuerte el tema durante la candidatura de Díaz Marín a la Alcaldía de Bello, pero él siempre dijo que no estaba, de facto, inhabilitado y continuó con su aspiración.
El proceso de responsabilidad fiscal de la Contraloría tiene que ver con hechos por presuntas irregularidades en un contrato en la Secretaría de Educación de Bello. Por esto, Díaz Marín y otros cuatro funcionarios de la Alcaldía de Bello fueron conminados a pagar $328 millones.
El exdirector ha sostenido que, en su momento, en este proceso no se tuvieron en cuenta los argumentos de su defensa. (Con datos de El Colombiano).
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