¿Metaverso?

Por Rafael Bravo 

“Del metaverso es más lo que no se sabe que de lo que en realidad se tiene alguna certeza. Lo que sí está claro es que ya se dio un gran paso para el desarrollo de un metaverso, lo que algunos esperan sea el “futuro del internet y las relaciones sociales ‘’. 

Facebook atraviesa su peor momento luego de las acusaciones salidas de una de sus exempleadas señalando a su cabeza Mark Zuckerberg de poner las ganancias por encima de los intereses colectivos y de desinformar al público en relación con el lenguaje de odio que tantos expresan en su portal. Para la izquierda, Facebook sirve de instrumento para el extremismo ideológico y responsable por los hechos de violencia ocurridos el 6 de enero cuando la turba trumpista irrumpió en el congreso para impedir la certificación presidencial. La derecha por su parte sostiene que redes sociales como Facebook son controladas por liberales que buscan acallar a la oposición. 

Mas allá de las distorsiones políticas, surgen muchos cuestionamientos sobre Facebook, Instagram y WhatsApp que en adelante estarán bajo la sombrilla corporativa de nombre Meta. Se pregunta si Instagram está contribuyendo a los niveles de ansiedad entre los jóvenes. ¿Si Facebook con sus algoritmos sirve para desestabilizar a países en desarrollo donde los recursos y controles para monitorear la plataforma son inferiores que en mercados más grandes? ¿Además, se cuestiona si la compañía es causa de la polarización global que divide a las sociedades? 

Desconocer el poder de Facebook es una necedad. Gracias a la cantidad de información que recoge de sus usuarios y de ser fuente de noticias que se difunden en su portal, parece claro que está en capacidad de alterar la discusión social bajo la mano de hierro de una sola persona: Mark Zuckerberg. Entonces se propone dividir a esa organización en 3 entidades como solución y que las autoridades federales ejerzan un control más estricto sobre su influencia. 

Lamentablemente, las leyes antimonopolio en las últimas décadas han sido muy débiles y propositivas a favor de las grandes corporaciones. En junio un juez falló a favor de Facebook en una demanda de 40 estados y la Comisión Federal de las Telecomunicaciones (FTC) alegando que los demandantes no probaron que esa compañía era un monopolio de las redes sociales. 

Quienes se muestran a favor de Facebook y sus adláteres WhatsApp e Instagram, argumentan que éstas últimas han permitido abrirles las puertas a millones de personas al mundo digital de manera gratuita y eficiente. Conectarse, compartir experiencias, hacer planes y acercarse a los amigos es lo que ofrecen esas aplicaciones. WhatsApp en particular se ha convertido en un medio para que pequeños emprendedores lleguen a sus clientes y expandan sus negocios. 

Uno de los cambios menos reconocidos en la economía global es el fenómeno a través del cual cientos de millones de clientes han logrado acceso por primera vez a nuevas tecnologías ingresando al comercio electrónico con enormes beneficios para los hogares y las economías. Asimismo, la inclusión financiera ha hecho posible a muchos salir de la pobreza. 

El giro que Zuckerberg quiere darle a Facebook con su propuesta del Metaverso lo define el New York Times de una forma menos compleja de la siguiente manera: 

‘’ Zuckerberg pintó un cuadro del metaverso como un mundo limpio y muy bien iluminado al que se entra primero con una herramienta virtual y aumentada y más tarde con sensores de cuerpo avanzados en los cuales la gente juega virtualmente, asiste a conciertos virtuales, sale a comprar bienes virtuales, colecciona arte virtual, se junta con otros avatares virtuales y participa de reuniones virtuales’’. ¿Suena muy irreal? Pues lo mejor es empezar a entender la nueva realidad. 

A propósito, el diccionario de la RAE define al avatar como la ‘’ representación gráfica de la identidad virtual de un usuario en entornos digitales’’. En otras palabras, tendremos no sólo una identidad física, sino que ahora seremos un avatar en el universo digital o mundo paralelo. Fascinante.