5 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

¿Merecía Roberto Vélez que Petro pidiera su cabeza en la Federación de Cafeteros? 

Roberto Velez

@Fedecafeteros 

Sin pena ni gloria se va Roberto Vélez de Federacafé, por expresa solicitud del presidente Petro como lo dijo el mismo gerente, pero quien, además, ya está jubilado.  

La verdad es que también lo saca el inevitable calendario. Porque el mejor gerente cafetero es el buen precio y tuvo precio externo y devaluación. 

Pero, ¿qué hizo Vélez?, ¿Reestructuró la Federación Nacional de Cafeteros? ¿Volvió a los caficultores más competitivos? ¿Cómo avanzó en la renovación de las plantaciones? ¿Cómo ha sido el desarrollo de la paquidérmica Procafecol? ¿Qué ha pasado con la burocracia internacional, empezando por la oficina de Nueva York, que ha incurrido en gastos ilimitados? 

Roberto Vélez llegó a la Federación por la imposición del gobierno de Juan Manuel Santos que inicialmente quería nombrar a Juan Esteban Orduz de la oficina de Nueva York, contra el candidato de los comités de cafeteros y al final, impuso a su segunda ficha que era Roberto Vélez. 

¿En qué quedarán los cafeteros como ha sido últimamente, en una agencia del Estado, por la incidencia y protagonismo del ejecutivo en el manejo del Fondo Nacional del Café? 

La Federación no fue en los últimos años lo que hizo históricamente, y la gestión de Vélez pasa sin pena ni gloria. 

Al principio, el gobierno Duque les ayudó a los productores con precio y desde el 2018 han tenido una excelente cotización internacional, buena prima y adicionalmente una devaluación que ha multiplicado el ingreso a los caficultores. Además, gracias a la caída de la producción de Brasil por dos heladas y una sequía de los últimos años. 

Los analistas y expertos dicen que institucionalmente es muy cuestionable la gestión de Vélez. Hoy La Federación ya no exporta sino el 12% del Café de Colombia, no tocó en 7 años la estructura de la Federación, las Tiendas Juan Valdez no despegan, deja el monumental pasivo de los incumplimientos por ventas de futuros, debilitó el sistema cooperativo incluyendo a Expocafé, y se le suma la desaparición de algunas de ellas incluyendo a la primera del país, que era la Cooperativa de Caficultores de Andes, con unos nubarrones inexplicables. 

Adicionalmente, en términos de competitividad y productividad, no se han renovado más de 45 mil hectáreas de una meta de 80 mil al año, para poder mantener un nivel de producción del orden de 14 millones de sacos en forma sostenida como mínimo y ya estamos alrededor de 11 millones de sacos al año. 

Si con Roberto Vélez en la Federación no se aprovecharon los buenos precios para ser más competitivos, pues que no olviden que las crisis son eternas. 

Es mucho lo que está en juego para los caficultores y para el país en general.  

El Reverbero de Juan Paz estará atento a la baraja de candidatos para ver quien llegará y quien aceptará tremendos desafíos.