@petrogustavo
El presidente Petro lleva 75 días en la Presidencia, y las encuestas ya no le favorecen, en lo que se constituye en un hecho sorpresivo.
¿Saben por qué? Porque es primera vez en la historia que a un presidente colombiano se le acaba la luna de miel en menos de los 100 días de su gobierno.
Por eso fue una gran sorpresa la masiva marcha del pasado 22 de septiembre, la cual se cumplió en 33 ciudades del país, especialmente en las grandes capitales.
El gran golpe que acaba de recibir el presidente Petro y sus seguidores, es que la aprobación del mandatario que en agosto marcó el 56%, y la desaprobación estaba en el 20%, la misma se situó ahora en octubre en 46% y la desaprobación en el 40%.
Eso quiere decir que la aprobación bajó 10 puntos y la desaprobación subió 20%.
Esta encuesta de Invamer Gallup fue realizada entre el 8 y 18 de octubre.
¿Y qué ha pasado en estos 75 días para que se desplome la esperanza en el gobierno del cambio?
La desconfianza que han generado sus ministras de Minas y Energía y de Agricultura, Irene Vélez y Cecilia López, en los temas de hidrocarburos, petróleo y gas, y en la compra o “democratización de las tierras”.
En el tema económico, las referencias directas del presidente al Banco de la República por el manejo de las tasas de interés y las críticas por la inflación, sus anuncios sobre impuestos a los capitales golondrinas, la reforma tributaria, Ecopetrol y las empresas extractivas, la inseguridad jurídica y las incoherencias en la paz total de negociar con grupos criminales.
Estas aguas ha tenido que calmarlas el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, pero no ha ido suficiente, porque el dólar ha estado hoy por encima de los 4,900 pesos.
Y para completar, el presidente Peto Salió a atacar a Estados Unidos, como lo hizo anoche en Urabá.
Pero ha habido otros hechos contradictorios por el discurso de campaña.
El Departamento Administrativo de la Presidencia salieron fondos por más $172 millones para amoblar las residencias oficiales con lujos como almohadas y cobijas de plumas de ganso y televisores de $53 millones y la vicepresidente gastó $52 millones del erario público para hacer una fiesta.
El estudio de Invamer tiene un margen de error del 2,83% y un margen de confianza del 95% y los datos que lo componen fueron recogidos del 8 al 18 de octubre.
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