5 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Las mujeres: muy bien representadas en Paulina Aguinaga

Por Claudia Posada (foto)

Sin duda, María Paulina Aguinaga Lezcano, la concejal que asumió por este resto de año la presidencia del Concejo de Medellín, no es  una más entre los que pasan sin pena ni gloria por los organismos del   Estado o ramas del poder público, ocupando una curul que definitivamente les queda grande.

Por fortuna, en los últimos años, ha incursionado en la política un número significativo de mujeres si lo comparamos con épocas pasadas; y aunque el machismo persiste en las esferas de poder y decisión, tenemos talentosísimas mujeres que nos hacen quedar muy bien a las féminas. Es el caso de Paulina  Aguinaga, quien en su primer periodo como concejal de la capital antioqueña, ha sobresalido por sus debates serios y bien documentados; se esté o no de acuerdo con sus posiciones, no se le puede desconocer profundidad, coherencia y firmeza de carácter.

Si bien para los ciudadanos en general, ya los partidos políticos no son los orientadores de los destinos político-administrativos sino que prefieren liderazgos individuales, la doctora Aguinaga no es una rueda suelta en su colectividad, tiene disciplina  y respeta directrices, siendo, eso sí,  de criterios firmes y de convicciones.

Admirable que una mujer de esa juventud  asuma con tanta responsabilidad los compromisos que exige ser  concejal de una ciudad tan compleja como Medellín;  representar el poder ciudadano que les es  delegado a las figuras políticas al alcanzar un escaño en las corporaciones públicas, es deberse a las comunidades y rendirles cuentas. Paulina Aguinaga lo ha hecho con lujo de competencia. Ha demostrado que su amplia preparación académica y los  cargos que le han asignado aquí y en el exterior, por méritos, los ha puesto al servicio de la ciudad y los ciudadanos; verdadera razón de ser de un político con ética y honestidad.

Quisiéramos más mujeres y hombres como Paulina Aguinaga aportando saber y sensibilidad social. Por ahora contamos en Medellín con ella y en el Concejo con el talante de quien sabe exponer su pensamiento, sin imposiciones, pero con argumentos sólidos. Con absoluta seguridad en la presidencia del cabildo municipal, su voz será garantía para todos en la Mesa Directiva y para cada uno en sus curules.