26 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Las creaturas que rondan el valle

Por Irene Demirov  

El populismo ‘fabrica’ verdades, las ‘manufactura’. Las necesita para conseguir el apoyo irrestricto de la masa votante. 

En ese sentido se vuelve importante analizar, en el contexto de las elecciones 2022 y de la Revocatoria de Daniel Quintero, dos premisas sobre las cuales se seguirá construyendo paso a paso, la Toma Hostil de Medellín. 

Son dos ‘creaturas’ monstruosas salidas del vientre corrupto-putrefacto del Quinterismo, dos LEVIATANES luchando denodadamente por un poco de oxígeno, ese que logran respirar cada vez que un funcionario-contratista recita su mantra goebbeliano: “Una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad” 

Esas dos aberrantes premisas se dejan caer, como al descuido, en una entrevista o en titular de prensa, iniciando el trabajo para el cual fueron fabricadas:  Permear lenta pero contundente e imperceptiblemente, los medios, las redes y sobre todo, los cerebros dúctiles y maleables de mentes que fueron deliberadamente programadas (FECODE) para el abortaje de cualquier indicio de análisis crítico 

La primera premisa acaba de salir del horno; la segunda es uno de los argumentos que ha fundamentado el desgobierno y la actitud habitual de irrespeto a la legalidad que caracteriza la administración @QuinteroCalle 

Aberrantes, peligrosas, sofistas y engañosas: 

1. ‘El patrimonio de Medellín es patrimonio público, por lo tanto es patrimonio de la nación’ 

Leitmotiv que oímos repetidamente en un Space de Twitter la semana pasada sobre la Revocatoria, direccionado por bogotanos y con la planeada participación ‘espontánea’ de @QuinteroCalle 

2. ‘Para hacer lo correcto no hay que pedir permiso’ 

Creatura emergida directamente de la boca de Quintero Calle, para justificar la exclusión deliberada de la Junta de EPM en la toma de la decisión de la demanda contra los contratistas de HidroItuango. 

El adoctrinamiento que surge de la repetición de esas dos mentiras es complejo y sutil, sinuoso y líquido. Muy perjudicial y dañino. Es divisorio y patente de corso para que  un gobernante sin escrúpulos birle y burle la institucionalidad a la cual está obligado a respetar por la Constitución y la ley. 

Esas dos verdades son importantísimas para justificar La Toma Hostil de la Ciudad, toda vez que la narrativa del ‘Mesías-Salvador’ que viene a construir una nueva Medellín o Colombia, libre de sufrimientos y necesidades, necesita columnas y torres sobre las cuales, primero se destruya todo lo que hay, para luego construir, sobre las cenizas y los cadáveres, la utopía prometida en el calor de una campaña electoral plagada de humo, engaños y mentiras. 

Todo ese juego de torres, peones y reinos prometidos es una partida de ajedrez, a gran escala, que se viene jugando desde hace varios años. 

Muchos participan, o participamos en el juego, aún sin saber que lo estamos haciendo; en la obra universal del SXXI casi todos nos movemos como el Alfil o el Caballo, con movimientos pre establecidos. 

El juego no necesita voluntad expresa para jugarse; es como cuando entramos a las redes y nos enteramos, SIN QUERER, que Palomeque se distanció de Cruz (Ni me importa, ni busqué saberlo, ni quiero gastar una neurona en procesar o retener esa inútil info. Es más, tendría problemas para identificarlos en una fila de reconocimiento de sospechosos) 

Sin embargo, y ante tu propio asombro, un día en una discusión de amigos, resultas hablando de esa historia, y si el debate se alarga, hasta (HORROR!) tomando partido! 

Terminas coleccionando basura informativa que nunca pediste saber. 

¿Por qué? Esa es otra historia. 

Por ahora, concentrémonos en jugar el ajedrez regional con más estrategia; cambiemos la dinámica y participemos conscientemente. Sigamos fortaleciendo los grupos cívicos de defensa de la ciudad y la institucionalidad. Sigamos llamando la atención sobre esas ‘creaturas’ que van haciendo camino, no al andar, sino al rodar. Evitemos que sigan teniendo la oportunidad de una bocanada más de Oxígeno, evitemos que sigan usurpando el ropaje de verdad. 

Evitemos que la fábrica de verdades del populismo siga en funcionamiento. Al menos en Medellín 

Mucho cuidado. 

Nota: Como esas dos mentiras que circulan, hay muchas más que andan rondando el Valle. La cuestión y el compromiso de cada ciudadano es reconocerlas, mirarlas a la cara y desecharlas como la basura que son.