5 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

José León Jaramillo y la U. de Medellín

 

Por José León Jaramillo Jaramillo (foto)

Excelente discurso de posesión del ex ministro Alejandro Gaviria Uribe, como rector de la Universidad de los Andes, lástima que no lo hubiere pronunciado como nuevo rector de la U de M, pues una persona como él, verdaderamente liberal y estructurada, es la que nuestro claustro requiere.

Sus palabras les caen como anillo al dedo a muchas universidades, pero no se las deberíamos recomendar a la única autoridad de la UdeM, porque, como dicen en el Peñol, “Al hombre no le dentra”.

Todos lo deberíamos leer y resaltar lo positivo y por ello creo que debemos difundir las siguientes reflexiones consignadas en ese raciocinio. Me tomé la libertar de transcribir algunas cambiándoles el tipo de letra: “La universidad debe mitigar las diferencias sociales, no amplificarlas. Debe ser un instrumento de movilidad social, no de perpetuación de los privilegios”.

La universidad debe ser el lugar donde se debaten las verdades incómodas. “Toda la dignidad de la Universidad reside en su capacidad de decir verdades duras pero lúcidas … Quiero mencionar algunas de esas verdades: la creciente institucionalización de la demagogia, las insalvables tensiones entre progreso material y sostenibilidad, las trampas de la meritocracia, las falsas promesas de la medicina moderna, la explotación política de la corrupción y del bienestar de los niños, la insuficiencia de las instituciones globales para enfrentar los grandes problemas de acción colectiva, etc.

Existen otras tantas verdades incómodas sobre la universidad moderna: su papel en la perpetuación de ciertos privilegios, la falta de curiosidad por el mundo, la excesiva especialización, la obsesión con los rankings y la transformación de la investigación en una actividad industrial”