26 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Formación informática y educación digital para todos en todas las profesiones

Por Enrique E. Batista J., Ph. D. 

https://paideianueva.blogspot.com/

Profesionales en múltiples campos, trabajadores de las más diversas ocupaciones, estudiantes, maestros y padres de familia se convirtieron en seres digitales a la fuerza. Todos fueron obligados a usar de manera más intensa y focalizada diversos recursos informáticos para propósitos académicos, profesionales, de investigación, laborales o personales. Muchos fueron compelidos, por razón de la extraordinaria circunstancia de salud, a reconocer la existencia y a emplear herramientas informáticas que estaban ahí, pero que la rutina diaria y el acomodo a la persistente tradición negaba su oportuno uso y ventajoso aprovechamiento. Las grandes empresas de tecnologías informáticas también fueron sorprendidas, sin embargo, aprovecharon la oportunidad para distribuir, entre otras herramientas, plataformas de videoconferencias que no habían sido pensadas para el trabajo en línea o para el aprendizaje apoyado en medios informáticos. También, numerosos adultos aprovecharon la oportunidad que habían diferido para adquirir nuevas destrezas y conocimientos mediante el de herramientas informáticas para la socialización, comunicación y recreación o para perfeccionar sus habilidades profesionales, actualizar conocimientos, estrategias y procedimientos. 

Desde antes de las crisis de salud en 2020 y 2021 ya existían directrices que señalaban la urgente necesidad de una   formación para emplear herramientas informáticas en las escuelas, colegios, universidades, en las profesiones y demás sectores laborales.  Formuladas desde hace varios años, esas directrices cubren, sin excepción, a cada ciudadano, a cada profesional, a cada trabajador, a todos los alumnos y también a los educadores de todos los niveles educativos. 

Por ejemplo, La Unión Europea ha fijado el Marco de Referencia Común de Habilidades Digitales,conocido como DigComp 2.1 que se espera posean todos los habitantes de dicha Unión. (https://rb.gy/l91ajn). En ese marco, actualizado recientemente, las habilidades digitales básicas son divididas en cinco áreas de habilidades: 1. Alfabetización digital; 2. Comunicación y colaboración; 3. Creación de contenidos digitales, 4. Seguridad digital y 5. Resolución de problemas. A ellas se asocian 21 campos de formación, tal como se observa en el siguiente Gráfico (fuentehttps://rb.gy/rxqpxu): 

Ya es de Perogrullo resaltar que son necesarios los aprendizajes para el uso de recursos informáticos para la resolución de problemas enfrentados a diario en las actividades personales y profesionales. Del mismo modo, los recursos tecnológicos permiten con su empleo creativo generar nuevos conocimientos, innovar procesos, crear productos digitales o físicos, realizar emprendimientos económicamente productivos, participar colaborativamente en el entendimiento de problemas y adelantar posibles soluciones en los ambientes digitales y en especial en aquellos que reflejan problemáticas en el mundo real. No solamente se progresa en la habilidad para resolver tareas complejas, sino que se contribuye con la creación de nuevos conocimientos y con el enriquecimiento de las propias prácticas profesionales. 

En pocos años las tecnologías informáticas han generado al menos media centena de nuevas profesiones y seguirán creando muchas más a pasos acelerados. Las profesiones vigentes hasta ahora  han sido afectadas  en sus modos y estrategias tradicionales de formación y certificación así como en expresión interna y externa de la  respectiva  práctica profesional. Algunas desaparecerán, otras tendrán cambios abiertamente visibles y contrastantes que  las mostrarán como si fuesen nuevas o diferentes. 

Los profesionales actuales han requerido y seguirán necesitando la formación continuada en habilidades blandas  (softskilling o habilidades socioemocionales), cualificación adicional (upskilling,combinación de  formación en nuevas habilidades con la experiencia en el trabajoy reciclaje formativo (reskilling, recualificación laboral para adecuarse a los requerimientos de  formación necesarios para los nuevos campos ocupacionales y profesionales que surgen de la Cuarta Revolución Industrial  y para reducir el impacto en el desempleo agravado en algunos caos por los procesos de automatización). Esos tres procesos formativos son necesarios para persistir y existir en el trabajo; no se trata de procesos ocasionales sino permanentes, con lo que se da cuerpo al ya viejo mandato, hoy más necesario, de aprender durante toda la vida. 

Los procesos de softskilling requieren el desarrollo de las habilidades socioemocionales, entre muchas otras:   Habilidades para innovar y crear, trabajar colaborativamente en grupo tanto presencial como virtual, liderazgo, solución efectiva de problemas, comunicación clara, sentido de resiliencia.  

Distintos autores han hecho una descripción del impacto que diversas tecnologías informáticas han tenido en profesiones como: Traducción, bibliotecología (o ciencias de la información), educación, psicología, arquitectura y en las distintas áreas de la salud. (Véase:https://tecparaurss.blogspot.com/2018/12/impacto-de-las-tic-en-las-profesiones.html?m=1).  

Desde hace algún tiempo se ha enfatizado, para incrementar el talento humano que será menester para la denominada economía 4.0, la formación en profesiones STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics), poniendo especial énfasis en que un mayor número de bachilleres se vincule a ellas y a que se incremente de manera significativa el número de mujeres que ingresan a esas carreras.  

Se puede reconocer que los más recientes desarrollo en los campos ocupacionales y profesionales se han dado, entre otros, en robótica, nanotecnología, inteligencia artificial, Internet de la Cosas y Blockchains. Hoy se conocen campos ocupacionales, profesionales y cargos de dirección que hace diez años no existían. Las denominaciones siguientes pueden corresponder a programas técnicos, tecnológicos, profesionales o de postgrado, incluso, en una variedad de casos, a la certificación de microcredenciales o microtítulos. Por ejemplo: Profesional en comunicación digital, Profesional Desarrollador de Apps, Gerencia de redes sociales, Dirección científica de  en Big Data, Ingeniero front end y back end,  Gerencia de e-commerce, Profesional en agricultura inteligente, Técnico en manejo e drones, Especialista en ciberseguridad,  Profesional en Marketing digital, Especialista en información geográfica, Especialista en Internet de las cosas, Diseño y administración  de aprendizaje en línea,  Diseñador de videojuegos y multimedia, Especialista en Blockchain y criptomonedas, Profesional en neuromarketing, Organizador de comunidades online, Especialista  de ventas online, Especialista de servicios financieros en Internet, Profesional en animación 3D, Profesional en videojuegos y multimedia, Experto en turismo colaborativo, Especialista en enseñanza en línea, Coordinador de apuestas en línea,  Administrador de Servicios en la nube, Profesional en Arquitectura de Software, Ingeniero de blockchain, Especialista en computación cuántica. (https://ticsegura.com/el-sector-tic-ha-generado-40-nuevas-profesiones/)  

Los profesionales actuales, como se indicó, accederán según corresponda a programas de upskilling o de reskilling. En uno u otro caso precisarán poner énfasis en las muy necesarias habilidades socioemocionales (softskilling). A los jóvenes, con conocimiento del mundo laboral y adecuada orientación académica personal, les toca abandonar la predominancia de las carreras tradicionales. Padres de familia y maestros pueden ayudar en este propósito, fomentando los campos profesionales que incrementan la posibilidad de empleabilidad con trabajo estable y bien remunerado en campos recorridos por la informática, incluidas las artes y la cultura.