6 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Por Nicodemo

La RAE (Real Academia de la Lengua Española) tiene varios significados para el singular de esta palabra.

Dice por ejemplo que cabrón es el macho de la cabra y que también se refiere al hombre que aguanta sin inmutarse insultos o impertinencias. Muy pertinente esta definición para el contenido de la siguiente opinión.

Este parece ser el caso de nuestros gobernantes o por lo menos de la mayoría de ellos frente al manejo del covid-19. Las críticas generalizadas por los inocultables malos resultados económicos y sociales y ellos ni se inmutan, siguen viviendo en la tierra de nunca jamás, el país se cae a pedazos y ellos detrás de una cámara anunciando lo bien que lo están haciendo, burlándose de todos nosotros.

Se encuentra tan anestesiada la mayoría de los mandatarios que ni siquiera copian actitudes exitosas de otros países, como promover la ingesta de medicamentos que han sido útiles, atender las recomendaciones de los médicos que han hecho autopsias a fallecidos de Covid-19, buscar la inmunidad de la manada como en Suecia.

Nada, solo oyen las malas noticias y se preocupan y anuncian más represión como si así se fuera el virus.

Duque está pasando a la historia de Colombia como el presidente más inepto que hemos tenido y solo sobresale por las repetidas metidas de patas, como el reciente ridículo mundial que hizo con el día sin IVA o mejor conocido internacionalmente como el Covid Friday y los gobernantes no se le quedan atrás, todos, como borregos, siguen un pastor que está más perdido que la moral en el Congreso de Colombia.

Que Colombia ha sido un ejemplo del buen manejo, que Medellín es la mejor de América Latina y una de las mejores ciudades del mundo en el manejo de crisis. Que nos encerraron temprano para potenciar los sitios de atención médica. Solo Medellín se comprometió con “EL PLAN MIL” (1.000 nuevas camas UCI), el veteranísimo ministro de salud habló de 10.000 nuevas UCI para el país y ya entregó 130, es decir, que solo les faltan el 98.7% del ofrecimiento.

Duque dijo que aspiraba a hacer 15.000 pruebas diarias. A ese ritmo puede llegar en diciembre a los dos millones de pruebas algo así como el 0.5% de la población colombiana.

Nos cuentan que están pagando las nóminas, que dan alivios tributarios, que llenan las despensas con los mercados que entregan, que subsidios en efectivo están al orden del día y muchos más sobre los que debemos estar eternamente agradecidos, agachar la cabeza y seguir viendo cómo se descompone aún más la economía y la sociedad.

Todo esto solo son puras patrañas. Los únicos que han ganado con esta supuesta pandemia son los gobernantes y sus amigos contratistas, algunos de ellos coincidencialmente aportantes a las campañas, tal como lo denunció la Contraloría, que es la única de las IAS que muestra resultados mientras las otras siguen en teletrabajo.

Otros grandes beneficiados son los enmermelados medios de comunicación y los bancos. Los unos llenos de pauta oficial y que han servido para aplaudir las malas decisiones y sobre todo para llenar de miedo a la población y los otros, que en una actitud propia de delincuentes, han sido los grandes villanos de esta crisis.

El ministro Carrasquilla en una actitud hipócrita, muy natural en él, sale cínicamente a través del Confis anunciando que suspende la regla fiscal por dos años a cuenta del Covid-19. Este caradura lo que debe decir es que, por las malas decisiones económicas, el país está en la peor crisis económica de su historia y para poder seguir gastando sin que se refleje en el déficit mejor lo deja de contabilizar.

Algo así como si una empresa está dando pérdidas y presenta la solución de mejor no llevar contabilidad.

Se habla de cifras del 6.1% pero hay voces autorizadas que hablan del 10.5% de PIB, el que recibió en el 2.5% cuando criticaba arduamente la anterior gestión.

Solo atendieron a la corrupta OMS en lo catastrófico, pero a la hora de ayudar, las personas hacen caso omiso, lo que la misma Organización Mundial de la Salud le dice. Veamos estos ejemplos:

  • María Van Kerkhove, jefa de la Unidad de Zoonosis y Enfermedades Emergentes de la OMS dijo: “A partir de los datos que tenemos, todavía parece raro que una persona asintomática realmente transmita a un individuo secundario”.

  • Mike Ryan, director de Emergencias Sanitaras de la OMS, dijo: “El nuevo coronavirus Sars-CoV-2, el causante de la enfermedad covid-19, tiene el potencial de convertirse en un virus endémico y no irse nunca”.

  • La portavoz de la OMS, Margaret Harris, ha manifestado que “la OMS nunca ha aconsejado a los países que implementen un confinamiento generalizado para controlar la expansión del coronavirus. “Nunca dijimos que se aplicaran medidas de confinamiento. Dijimos que rastreáramos, aisláramos y tratáramos”.

  • En el documento de 15 de mayo de 2020 la OMS asegura: “Al momento de la publicación, la transmisión del virus COVID-19 no se había relacionado de manera concluyente con superficies ambientales contaminadas en Estudios disponibles”.

  • La doctora April Baller, quien encabeza los equipos de gestión clínica y control y revención de infecciones de la OMS, afirmó: “si no tienes ningún síntoma respiratorio como fiebre, tos o mocos no necesitas llevar una mascarilla médica. Las mascarillas pueden darte una falsa sensación de protección y pueden ser una fuente de infección.”

  • La doctora Chistine Francis, funcionaria de la OMS aseguró: “las mascarillas médicas como esta, (exhibiendo una mascarilla tradicional) no protege contra en nuevo coronavirus, cuando se utiliza sola. La OMS solo recomienda el uso de las mascarillas en casos específicos si tienes tos, fiebre y dificultades respiratorias deberías llevar una mascarilla y buscar asistencia médica, si no tienes estos síntomas no tienes que ponerte una mascarilla porque no hay evidencia de que protejan a la gente que no está enferma”

    A hoy 24 de junio las cifras no le dan la razón al gobierno. Nos encerraron cuando había 348 personas contagiadas, pero liberan a la mayoría de la población cuando estamos cerca de los 75.000 contagiados. Quién explica eso. Hace tres meses crecíamos a menos de 100 contagiados por días. Hoy es sencillo pasar de los 2.000 casos nuevos, cada día.

    Superamos a Suecia en contagiados y allá no encerraron a nadie. Estamos ya en el puesto 22 de los 188 reportados, hace tres meses estábamos en el 170, nos ganan países más pobres y más populosos. Egipto, Indonesia, Haití, Venezuela, Ecuador y 165 naciones más nos ganan en tener menos contagios.

    El próximo país al que vamos a pasar es China. ¿Pueden creer? China con 1.400 millones de personas en cuestión de una semana va a tener menos contagiados que nosotros. No somos ningún buen ejemplo para nadie más que para nuestros mandatarios y ellos se siguen felicitando por el buen trabajo que hacen y estudiando la manera de impulsar la economía, esa misma que se encargaron de estropear.

    Las estrategias del tratamiento del Covid -19 lo único que han dejado a la mayoría de los colombianos es desempleo, miseria, ruina, miedo y una rabia generalizada que se va a manifestar cuando levanten la centena. Hasta las iglesias que son refugio espiritual se escondieron.

    Nos han mentido descaradamente, las cifras son un hazmerreir. Para el 22 de junio la Universidad Jhons Hopkins está reportando 2.353 fallecidos, mientras que la página institucional del INS reporta 2.310, el día 23 de junio pasa lo mismo la INS reporta 2.404 y la JH dice que son 2.426.

    ¿Cómo es posible que una Universidad en los Estados Unidos tenga mejor información que el gobierno nacional? Hablan de pandemia donde el 88% de los casos activos son atendidos en la casa y donde la tasa de mortalidad es apenas el 3% y en las personas menores de 40 años, menos de 1%, y donde más de la mitad de los municipios no ha llegado un solo caso de Covid-19, donde en diez municipios se concentra el 75% de los contagios, donde cierran municipios de 100.000 habitantes por 11 personas contagiadas, donde más de 500 municipios  tienen menos de 50 casos. ¡Señores, esto no es una pandemia!

    Nuestros mandatarios están sordos y son indolentes. Están arruinando al país, atacan a sus ciudadanos sin misericordia y no aceptan que se están equivocando y ni se inmutan con las críticas que les hacemos.

    Por todo esto se puede decir, sin temor a ser injustos, que nuestros gobernantes son unos ¡CABRONES!