3 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Burro cargado de letras

Carlos Alberto Ospina

Por Carlos Alberto Ospina M. 

Es necesario iniciar las diligencias legales y constitucionales a fin de lograr la desmovilización, no la amnistía, de las facultades especiales exigidas por Petro para aparentemente sacar adelante sus reformas. Estos pretendidos superpoderes tienen el hedor de un déspota que busca pasarse por la faja el trámite ordinario de las leyes, desconociendo la función propia del legislativo y poniendo trampas por todas partes a manera de minas antipersona; es decir, en contra del Estado Social de Derecho.

Muy peligroso que cuente con la conspiración entre congresistas que, aprueban las cosas mediante golpes en el pupitre, sin revisar ni leer a cabalidad los distintos proyectos, a cambio de vagar por el recinto disimulando las manos untadas de sobornos y de mermelada corrupta. ¡Qué espectáculo atroz de lances para robar el erario! Es obligación dejar evidencia en las multiplataformas, los distintos medios de comunicación y en las redes sociales sobre esas confabulaciones. Aquel que quebrante el bienestar general de la población debe quedar expuesto y recibir la correspondiente sanción moral, como mínimo.

En el Plan Nacional de Desarrollo, la nombrada Ley de paz total y las reformas Tributarias y de Salud; entre otras iniciativas dotadas de un brazo sabroso de turbiedad, aparecen más de veinte facultades extraordinarias para gobernar por decreto al estilo de la mentalidad populista y la orientación acomodaticia de Gustavo Petro. No conforme con alcanzar el poder a consecuencia de un estrecho margen, el líder del tal Pacto Histórico, concibe el país a modo de vaca de la boda que debe seguir cada ocurrencia por descabellada que sea.

El presidente del 50,51% de los votantes sabe que ganó los comicios raspando la olla y con pelos en el alambrado. Por eso, debe gobernar por y para todos de ciudadanos. A día de hoy sigue al pie de la letra el ‘manual dictatorial de Chávez´ y la cartilla de un burro cargado de letras que no aporta valor al verbo ni al sustantivo propio. ¿Hay transparencia en la declaración de la política general de este mandatario? No, debido a una cuestión de exigua confianza, falta de unidad de criterio, ausencia de vínculo conceptual y nada de intencionalidad constructiva.

Las multitudinarias marchas de la oposición ofrecen la certeza de que la gente no está dispuesta a tragar bilis ni a soportar la pérdida de los derechos fundamentales a la salud, la libertad, la justicia, el desarrollo integral y la equidad social. Así, intente “mover la línea ética” a la usanza de las tácticas utilizadas en su mugrienta campaña electoral y hable de la ‘destrucción total de Colombia’ en el caso de no aprobar las reformas, los hechos develan un gobierno fallido en razón a que no posee el respaldo de las mayorías. En ese contexto, es claro que se sostiene a punta de coimas, promesas e ideas efectistas en procura de mantener entrampados a los flojos, a los vagos, a los adoctrinados y a los atenidos que esperan que caiga maná del cielo.

De forma precisa, como quien oye llover, se escuchan las insípidas afirmaciones de Gustavo Francisco Petro Urrego. Léase el siguiente botón de muestra que, sigue palabra por palabra, los hechos insultantes provenientes de este individuo:

“si logramos que una serie de actividades de la sociedad colombiana que hoy se consideran crimen no se consideren crimen más adelante, pues habrá por definición menos crimen en Colombia”. (sic) [Gustavo Petro, 19 de agosto de 2022 en el discurso de posesión del nuevo director de la Policía]. Una propuesta de ridícula gravedad.

“¿Por qué no hacemos una colaboración aeroespacial entre Colombia y Chile?… Lo que queremos es aprovechar el mayor avance de Chile. Por alguna razón, los gobiernos de Colombia, a pesar de tener en su geografía la órbita ecuatorial pasando por nuestro territorio, no han aprovechado esa posición sideral” (sic) [Gustavo Petro, 9 de enero de 2023, Encuentro con el presidente chileno Gabriel Boric]. Se debe estar revolcando en la ‘tumba cósmica’ Stephen Hawking.

“En el país no hay desabastecimiento, solo lo hay en una parte porque algún gobierno construyó una carretera sobra una placa tectónica. Buscaremos eliminar el desabastecimiento en el sur del país” (sic) [Gustavo Petro, Twitter en respuesta a Blu Radio] Dicha explicación no soporta un análisis cualitativo. Hasta el pajarito que se posó sobre el hombre de Maduro sabe que el término correcto es “falla geológica”.

“La paz no se habla con hampones, señora. Eso es lo que hizo Uribe. La paz no se hace con hampones, porque entonces el gobierno es un hampón… No es lo mismo ser rebelde a ser un hampón…» (sic) [15 de marzo de 2021, entrevista de Vicky Dávila al senador Gustavo Petro] Él pica el azuelo, mirándose al espejo. Por consiguiente, tampoco soporta un análisis clínico dimensional, espectral, químico, cuántico, técnico, etc. Falla a la verdad a base de excesivo cinismo. Ahora mismo, el Congreso peruano lo declaró persona non grata.

Demasiado fácil predicar sin dar ejemplo ni demostrar el sentido exacto de las palabras, en razón a que la lengua es el azote del culo. Reitero, ¡vamos de capa caída y de nalgas!