3 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Ni enemigo, ni concepto

Iván Duque ha utilizado varias estrategias de ‘marketing’ para posicionar su imagen, pero la crítica ha sido implacable

Por Ariel Avila.

El País de Madrid.

Se cumplen 100 días del gobierno de Iván Duque en Colombia: el balance, al menos a primera vista, es más negativo que positivo. Tres datos son claves. El primero, es que según la encuesta más reciente de Invámer la desaprobación del presidente pasó de 32,5% a 64,8% y su imagen favorable se sitúa en 27%, un desplome increíble. (foto Duque).

El segundo dato, es que el país se volcó a las calles. El movimiento estudiantil ha tenido un despertar y hoy es un actor político relevante. También los sindicatos, aunque muy debilitados, luego de años y años de reformas laborales, han salido a protestar, principalmente el sindicato de maestros, el más poderoso de Colombia. Pero sobre todo, una ciudadanía joven, crítica, eso que llaman nuevas ciudadanías, ha salido a protestar.

Se espera que para el próximo año se unan los campesinos cocaleros, el poderoso movimiento indígena que también por años estuvo dormido y algunos movimientos campesinos. En tercer lugar, el gobierno ha quedado atrapado en medio de dos grandes escándalos de corrupción, que son algo así como herencias de hace varios años, pero que le explotaron en las manos. El caso del ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla con sus “bonos de Agua” y el reciente caso del fiscal general con el caso Odebrecht, escándalo que deja dos muertos en una semana. (Lea el análisis).