30 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Fondos inmobiliarios en crisis, y los siguen promocionando

Ha sido de una gran acogida en las franjas calificadas de la opinión, y en el sector financiero, la nota «Fondos inmobiliarios de inversión: un modelo en crisis», de nuestro habitual columnista Carlos Mario Restrepo Tamayo.

Las diversas reacciones a todo nivel demuestran que esta denuncia resultó muy oportuna. El columnista interpretó y recogió las angustias que padecen miles de ahorradores, personas y familias que ven perder sus ahorros producto del esfuerzo y trabajo de toda una vida, sin ser atendidos ni escuchados. Mejor dicho, puso el dedo en la llaga.

Afortunadamente con esta denuncia de esta riesgosa situación que se comenta en muchas reuniones sociales, algunos medios como la W, por ejemplo, se ha sumado a esta difícil coyuntura y les abrió el micrófono a sus oyentes para que quienes se sientan perjudicados con este modelo de inversión, denuncien sus casos y sean escuchados por las entidades de vigilancia y por las altas directivas dueñas de estos fondos.

La verdad es que resulta sorprendente e irrespetuoso encontrar en plena crisis anuncios publicitarios en las páginas WEB de estas importantes entidades financieras, bancos y corporaciones, promocionando e invitando para que más personas inviertan en esta “maravilla” de modelo de inversión como la mejor alternativa del mercado. Increíble que, frente a esta cruel realidad, mantengan sus piezas publicitarias buscando incautos ahorradores a pesar de la crisis que enfrentan estos fondos.

Es hora de que nos pongamos serios frente a estas entidades que gozan de nuestra confianza para que manejen nuestros ahorros con responsabilidad.

Es necesario y obligatorio que los ahorradores reciban respuestas serias, claras, y precisas sin evasivas y con soluciones prácticas y reales.

No pueden olvidar estos directivos la gran responsabilidad que tienen y las sanciones que contempla la ley por acción y por omisión en el ejercicio de sus cargos en forma solidaria e ilimitada.

Tampoco es menor la responsabilidad que les recae a los representantes de la Superintendencia Financiera y de Sociedades.

Soldado avisado no muere en la guerra.