Extraña y tardía columna de Donadío con flojas afirmaciones, contra el expresidente Virgilio Barco

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En la página web de losdanieles (Daniel Coronell y Daniel Samper Ospina) apareció hoy una columna, que fue igualmente publicada por el periódico El Espectador, del periodista Alberto Donadío, en la que afirma que el expresidente Virgilio Barco Vargas fue el directo responsable del exterminio de la Unión Patriótica, para lo cual contrató al espía israelí Rafi Eitan, quien dirigió al ejército colombiano en tan macabra operación. 

Esa afirmación, por lo demás ligera y sin ningún sustento en pruebas reales y comprobables fue inmediatamente rechazada por varios ciudadanos.  

El primero fue el profesor universitario Ramón Elejalde quien trinó desde muy temprano: “Con todo respeto difiero de las afirmaciones de Alberto Donadío sobre Virgilio Barco. Es una columna muy precaria de pruebas (me dijeron, no quedaron actas, etc), además cuando todos los sindicados ya se encuentran muertos. Barco no era de ese talante”. 

Luego ripostó el exparlamentario Carlos Arturo Piedrahita: “Muy difícil creer lo expresado por Alberto Donadío sobre el Presidente Barco. Las pruebas que dice conocer, 34 años después, son demasiado vagas y sin solidez alguna”.  

Finalmente el doctor Álvaro Forero Navas expresó: “Lamentable la pobreza periodística de la columna de Alberto Donadío publicada hoy en Losdanieles, contra la memoria histórica del expresidente Virgilio Barco Vargas. Me pareció muy débil, muy temerario, muy poco creíble, no lo de la contratación de Rafi Eitan, sino pretender que el presidente Barco hubiese aprobado una estrategia de exterminio. No lo creo. No aportó más que un chisme”. 

También ha llamado la atención entre los ciudadanos del común el silencio del Partido Liberal y sus directivas; de César Gaviria, que fue Ministro de Gobierno del doctor Barco; de Rafael Pardo; de Juan Fernando Cristo y su hermano Andrés, reconocidos paisanos del doctor Barco. 

Otro hecho a destacar es el bombo que reconocidos periodistas le han dado a esa columna, cuando de su lectura se desprende rápidamente la pobreza de argumentos que esgrime.