En una reunión de empresarios en el Club Unión se habló acerca de la guerra sucia que se desató en las redes sociales y en los chats durante esta campaña electoral.
Las campañas políticas en la era digital se han convertido en confrontación de calumnias y mentiras, que al final terminan perjudicándonos al elector desprevenido que llega desorientado a las urnas.
En la conversación salió a relucir la gallardía y el coraje con el que la campaña de Aníbal Gaviria ha enfrentado la guerra sucia desatada en su contra. Ni un solo insulto, ni una sola palabra ofensiva han salido de esa campaña. Dice uno de los empresarios que está apoyando la campaña de Gaviria, que la orden al interior de la campaña fue: a cada insulto, a cada calumnia, responder con ideas.
Y parece que la estrategia les dio resultado y han logrado unir a los antioqueños que en una sola idea: Es el momento de Antioquia.
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