Se nos calentó la atmósfera terrestre

Por Claudia Posada 

Aunque para algunos no hay tal cambio climático y sigan insistiendo en que no son ciertas las causas del calentamiento global, cabe recordar que ya en el año 1873, el geólogo italiano Antonio Stoppani habló de la progresiva influencia de la humanidad sobre el medio ambiente; y por su parte, Paul J. Crutzen, Premio Nobel de Química en 1995, mencionó cómo la humanidad seguirá siendo, por milenios, una fuerza ambiental determinante. Por otro lado, para prevenir futuros y graves problemas ambientales, hay que reconocer los peligros antrópicos como derivados de la acción directa y dañina de los seres humanos sobre la naturaleza al contaminar el agua, el aire, el suelo, deforestar, producir incendios, entre otros. Además, los principales daños al entorno ambiental, de origen antrópico, se presentan como consecuencia del crecimiento industrial, y específicamente del desarrollo de actividades extractivas: gas, petróleo y minería. 

Según definición de las Naciones Unidas, el cambio climático hace referencia a los cambios a largo plazo de las temperaturas y los patrones climáticos. Estos cambios pueden ser naturales, pero desde el siglo XIX, las actividades humanas han sido el principal motor del cambio climático, debido particularmente a la quema de combustibles fósiles, como el carbón, el petróleo y el gas, lo que produce gases que atrapan el calor. En el crecimiento industrial desaforado, adverso al ambiente, tienen mucho que ver los estilos de vida y el consumismo. Para la Fundación Aquae (de Madrid, España), por ejemplo, existe el concepto de “triple vertiente –ecológica, económica y social- (que) implica un cambio importante en la actual escala de valores y actitudes, ya sean desde la óptica de la sostenibilidad medioambiental y de utilización de los recursos naturales como del desarrollo económico y del progreso social. Es por esto que nuestra misión consiste en defender un nuevo modelo de desarrollo económico y social sostenible, apostando por la educación, la innovación social y el compromiso con la dignidad de las personas. Como Aquae, ya en la consciencia social de organismos e instituciones públicas y privadas en Colombia, se ha integrado el concepto de desarrollo sostenible, imperativo en el mundo de hoy.  

Tal vez el desconocimiento de lo qué es y para qué es la capa de ozono, hace que las consecuencias de los daños a ella, no nos suenen a culpa de nosotros. Conocer las inconveniencias de prácticas adversas a su conservación, permitirá ser más responsables. El ozono se encuentra en la troposfera, es decir, en la capa más baja de la atmósfera; y en la estratosfera que es la segunda capa de la atmósfera.  Cualquier daño a la capa de ozono aumentará la radiación UVB proveniente del Sol que llega hasta la superficie de la Tierra con el potencial para provocar daños al medio ambiente y a la vida terrestre. Entre estos daños se encuentran el cáncer de piel, problemas oculares, efectos sobre el sistema inmunológico, disminución de las cosechas, perjuicios a los bosques y a la vida submarina. Al observar que en sus funciones “se encuentran la participación en la regulación del clima, tanto por el movimiento de las masas de aire frío y caliente sobre los océanos y masas continentales como por su efecto en las corrientes oceánicas y en el transporte del vapor de agua que después se vierte en forma de precipitación en los continentes, se ve, además, cómo actúa a manera de reservorio de algunos elementos químicos vitales para los seres vivos, como carbono y el nitrógeno”. De ahí que no nos extrañemos por el cambio climático pues la atmósfera se está calentando más rápido de lo que debería. Desde la revolución industrial la temperatura de la tierra ha incrementado de manera acelerada, no se puede negar. WWF, la principal organización de conservación de la naturaleza a nivel global, señala como amenazas por el aumento de la temperatura que, “se derriten los polos, sube el nivel del mar y las poblaciones costeras se ven afectadas. La agricultura sufre y peligra la seguridad alimentaria. Los fenómenos climáticos son más intensos, frecuentes e impredecibles. Según la ONU, Colombia es el tercer país del mundo más vulnerable frente al cambio climático”. ¿Acaso no estamos padeciendo ya fenómenos climáticos mucho más intensos y frecuentes que antes? En resumen “el ozono desempeña un papel importante en el control de la temperatura de la atmósfera terrestre”.  

(¿Será el calentamiento global lo que nos tiene tan agresivos?)