Los días de los santos inocentes y del «April´s Fool»

Por Enrique E. Batista J., Ph. D. 

La inocencia es forjada por la pureza, la ingenuidad, la candidez y la sencillez. Estos son cuatro atributos de las almas buenas, de las que siempre piensan en hacer el bien a la humanidad, en el bien común. Por ello, los diccionarios nos enseñan la etimología de tan bella palabra que, en términos sencillos, significa «no hacer daño». 

Pero el inocente no es un tonto como muchos podrían creer. No es lo mismo un sacrificado y santo niño inocente que un «tonto de abril», un «April´s Fool». En inglés un tonto, como sustantivo, es una persona no sólo es estúpida, sino que, además, carece de buen juicio. El voquible “fool” se deriva del francés antiguo donde tenía el significado de persona loca, falta de cordura; una palabreja que, a la vez, provino del latín «follis» con el significado de persona con la cabeza vacía (https://rb.gy/lw6w9t).    

Desde tiempos muy antiguos ha sido costumbre tomar un día del año para hacer picardías, engaños graciosos o creación de situaciones que hagan lucir a las personas como tontas y fáciles de engañar Muchas son concitadas a ejecutar acciones para que, al quedar en ridículo, sean sujetos de burlas y risas. 

En la tradición cristiana es bien sabido que el 28 de diciembre es el «Día de los Santos Inocentes». De otra parte, en muchos países del mundo se celebra el primero de abril el «Fool’s Day» (Día de los tontos). En uno y otro se hacen bromas, algunas ingeniosas o sencillas, mientras que otras pueden ser complejas y hasta humillantes para quien las sufre; otros se aprovechan de la ingenuidad de muchos para realizar estafas.  

La conmemoración por la Iglesia del «Día de los Santos Inocentes» el 28 de diciembre no fue creada para hacer bromas, sino para recordar a los niños que el rey Herodes mandó a matar en Belén poco después del nacimiento de Jesús. La fijación de ese día viene desde la Edad Media cuando la misma Iglesia, como en otras de sus fechas religiosas, tomó una fiesta pagana y la convirtió en esa conmemoración. Inicialmente, el día de los inocentes se celebraba después del 6 de enero, cuando ya habían llegado los magos de oriente (los llamados «Reyes Magos»).  

Esa fiesta pagana era la «Fiesta de los locos», que se hacía entre Navidad y año nuevo; era una fiesta llena de desenfreno y hasta profanación de lugares santos. Los relatos dicen que una de las ceremonias consistía en que “los sacerdotes disfrazados entraban en el coro bailando, saltando y cantando canciones picarescas. Los subdiáconos comían salchichas, jugaban a las cartas y a los dados sobre el altar; en lugar de incienso, quemaban suelas de zapatos viejos y excrementos”. La fiesta se llevaba a cabo en las iglesias, pero se extendía a otros ámbitos   de la población en procesiones y cabalgatas (https://rb.gy/8jdyer). En esa loca y nada santa fiesta se nombraba a un “Rey de las Bromas” quien, como tal, haría muchas de ellas a los habitantes de la comunidad. Para el  acto central de la impía fiesta se nombraba a un obispo burlón, un personaje grotesco para que oficiara una  misa jocosa y ridícula  (https://www.c2.org.mx/?p=5744).  

La historia de los tontos de abril («Fool’s Day»), por su parte, es también bastante remota; trasciende y recorre muchas culturas y se desconoce su preciso origen. En esos antecedentes se encuentran los festivales de regocijo y reconciliación llamados  «Hilaria» (alegría), en el antiguo  imperio romano, los cuales empezaban el 25 de marzo (fecha que más adelante se fijó para celebrar la Anunciación como comienzo de año) en los cuales, como en los carnavales actuales, las personas se disfrazaban  y, entre tantas picardías, a desprevenidos transeúntes les pegaban en las espaldas un pescado de papel  para simbolizar a aquellos peces fáciles de pescar; por ello fueron llamados «poisson d’avril» (el pescado de abril) y a las personas que caían en la artimaña le decían «Eres un tonto de abril» («Tu es un poisson d’avril»).  Otras narraciones sitúan el origen del «April´s fool» en 1582, cuando Francia impuso el calendario gregoriano el cual, por orden del Papa Gregorio XIII, había sustituido al calendario juliano. El año nuevo se pasó al primero de enero en lugar de a finales de marzo, pero muchos seguían celebrando el año nuevo el primero de abril. Sobre esas personas cayeron bromas, tomaduras de pelos, humillaciones y engaños a montones. (https://rb.gy/iwekv7).  

La cercanía de los días finales de marzo y del primero de abril se asocia con el equinoccio de primavera, cuando la floración y el reverdecimiento de la naturaleza invitaba a la alegría, a la celebración de festivales y carnavales y a la tentación de tomarle el pelo con chanzas, tramoyas, creación de situaciones chistosas, o a realizar encargos, búsquedas y tareas creíbles, pero imposibles o ridículas de cumplir.  

En la India y Nepal, a comienzos de la primavera, se celebra el festival «Holi» (festival de los colores y de la alegría). En Escocia se llama un «April Ggowk» (= pájaro cucú, un emblema de los tontos y torpes) y se cantan estribillos  cuando se sale a cazar a  los tontos. En la costa caribe colombiana también, el 28 de diciembre, cantan los niños estribillos muy sencillos como: «Inocente mariposa tu madrina es una bruja y mi madre una rosa». En Inglaterra se les llama «Gawby» un arcaísmo por idiota, tonto, estúpido; así mismo, entre ellos se dice que con ese día se rememora la misión, nada fructífera, del cuervo que fue enviado por Noé a buscar tierra donde anclar su Arca.  

Los japoneses, sudafricanos, neozelandeses y australianos celebran igualmente el «April´s fool», mientras que los italianos lanzan sus inocentadas con la «Pesce d’aprile» («Pescado de abril»). En todas partes, con distintas personas y en cada momento o circunstancias la chanza o trampa en la que caerá el inocente o tonto obedece a reglas diferentes no escritas, aunque se espera que esté recorrida por humor y que no sea ofensiva o violenta contra quien se hace la inocentada y que se salvaguarde su integrad física, moral y psicológica. En algunos lugares, se concibe que el afectado o la víctima de la inocentada que no responda  con humor tendrá muchos días recorridos por la mala suerte. (https://rb.gy/ddqbco, https://rb.gy/ce3zhl).  

Hay una regla sencilla para no ser víctima  de chanzas y aparecer como tonto: No olvidar que el 28 de diciembre es el «Día de los Santos Inocentes» y el primero de abril el «April´s fool Day». 

Ha circulado hace muy poco la noticia, con motivo de la actual crisis sanitaria mundial, que los países poderosos económicamente han decido que entre el 28 de diciembre de 2021 y el primero de abril de 2022, condonarán la deuda externa de los países más pobres,  que reducirán en tres cuartas partes sus  presupuestos de guerra  para  entregar un beneficio económico a cada pobre en el mundo y así contribuir a  superar el hambre, la desigualdad y la pobreza extrema en un plazo máximo de cinco años. Los dineros se entregarán, a manera de fiducia, para ser administrado por la UNESCO y la FAO como un modo de salvaguardia contra la corrupción. Esta es una noticia que muchos en su inocencia se tragarán, pero es preciso reiterar que los pobres e inocentes no son tontos. 

(Corrección: En mi columna sobre los villancicos «Noche de Paz» y «El tamborilero» anoté que en diciembre llega el equinoccio de invierno, en realidad se trata del solsticio como acontecimiento astronómico).