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Por Luis Fernando Gil Monsalve
LAS MUJERES DE GARDEAZABAL son una exploración cruda y sin adornos de la compleja realidad colombiana», dice historiador de la Universidad de Antioquia
Desde que conocí a Gustavo Álvarez Gardeazábal me llamó poderosamente la atención el hecho de que siempre es nombrado por propios o extraños con el segundo apellido, es decir, dándole más importancia a su árbol genealógico materno que a la herencia familiar paterna. Por eso, Gardeazábal, hace un homenaje a las matronas de su vida, destacando que no siente deseos sexuales hacia ellas, como lo sabe todo el país.
El libro “Las mujeres de la muerte” del autor Gustavo Álvarez Gardeazábal, nos sumerge en una exploración cruda y sin adornos de la compleja realidad colombiana.
A través de una prosa directa, el autor aborda casos de violencia descarada y sutil en un contexto violento que parece atemporal, sin lugar ni causa específica. Esta obra nos presenta una doble encrucijada, mostrando el sufrimiento y la valentía de las mujeres víctimas del conflicto armado. Dicho texto es el vivo ejemplo de que hay que generar amor u odio con lo que se escribe, no puntos intermedios, ya que solo con el primer cuento sabe uno sí se bebe o no esta gran dosis de historia, realismo y crueldad.
El texto reflexivo de Pablo Emilio Obando A. resalta la profunda conexión emocional que experimenta al leer este libro. Relata cómo la obra evoca recuerdos personales y lo lleva a contemplar la importancia de las mujeres en su propia vida y en la del autor.
Desde figuras maternas hasta profesoras que dejaron una marca indeleble, Gardeazábal rinde homenaje a las mujeres que lo rodearon, inspiraron y sostuvieron a lo largo de su vida.
La reedición de “Las Mujeres de la Muerte” es presentada como parte de la Biblioteca Gardeazábal, una colección que abarca diversas obras del autor.
Este relanzamiento, disponible en almacenes Éxito y Carulla, es un reconocimiento a la trayectoria literaria de Gardeazábal y su capacidad para retratar los contrastes y heridas de Colombia a lo largo de su historia.
La obra, que originalmente fue publicada en 2003, ofrece una mirada crítica y necesaria sobre el papel de las mujeres en medio del conflicto armado y su contribución a la historia del país.
Los que residimos en Medellín esperamos con ansias la Fiesta del Libro 2024 en donde Gardeazábal hará gala de por qué se ha convertido tras décadas de escritura y reimpresión de sus columnas y obras, como uno de los más grandes exponentes de la Literatura Colombiana del Siglo XX.
En resumen, “Las mujeres de la muerte” es más que una obra literaria; es un testimonio de la fortaleza y la resistencia de las mujeres colombianas en tiempos de guerra.
A través de sus relatos, Gardeazábal nos invita a reflexionar sobre el impacto de la violencia en la vida de estas mujeres y la importancia de reconocer y valorar su papel en la construcción de la historia de Colombia.
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