10 mayo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

El Oasis de la vida

Por Luis Carlos Correa Restrepo 

Fue invitado al velorio de su peor enemigo 

Cuando se acercó a ver el ataúd se quedó sin palabras. 

Un día estaba con mis compañeros de trabajo volviendo del refrigerio de la oficina, cuando de repente encontramos en la recepción un enorme letrero en el que estaba escrito: «Ayer falleció la persona que impedía el crecimiento de usted en esta empresa, está invitado al velorio, en el gimnasio». Al principio todos expresábamos tristeza por la muerte de uno de nuestros compañeros. Pero después comenzamos a sentir curiosidad por saber quién era la persona que estaba impidiendo el crecimiento de todos los de la empresa. La agitación en el gimnasio era tan grande que fue necesario llamar a los de seguridad para organizar la fila en el velorio.  

Conforme las personas se iban acercando al ataúd, la excitación aumentaba: «¿quién será el que estaba impidiendo mi progreso?», pregunté cuando estaba en la fila. Otro compañero dijo: ¡Qué bueno que el infeliz murió!  

«Ya vez, la gente envidiosa termina de esa manera», decía otro.  

Uno a uno los empleados agitados nos aproximábamos al ataúd mirando al difunto. Una vez ahí nos quedábamos unos minutos más en absoluto silencio, como si nos hubiesen tocado en lo más profundo del alma. Pues bien, en el fondo del ataúd había un espejo.  

Todos los que miramos adentro, nos veíamos a nosotros mismos, y junto al espejo vimos el siguiente letrero:  

«Solo existe una persona capaz de limitar tu crecimiento: Tu mismo. Tu eres la única persona que puede hacer una revolución en tu vida. ¡Tú eres el único responsable de tus resultados! Eres la única persona que puede influenciar tu felicidad y tu éxito. Eres la única persona que puede ayudarte. 

Al final recuerdo que nos quedamos todos en silencio, haciendo un nudo en la garganta.  

MORALEJA: Cuando las cosas no salen como queremos, muchas veces buscamos culpables en vez de hacernos responsables. Nos ponemos en plan de víctimas y pensamos que la culpa es de todos, menos de nosotros mismos. Culpamos a la familia, culpamos al gobierno, culpamos a la empresa, culpamos a la situación. Tu vida cambia cuando tu cambias. 

Así que deja de ponerte excusas y empieza a tomar acción. Si no tienes estudios, empieza a estudiar. Si te falta preparación, empieza a prepararte. Si hay crisis, reinvéntate y busca nuevas formas de generar ingresos. Si te faltan contactos, busca la forma de hacer esos contactos. 

No te quedes cruzado de brazos creyendo que eres una víctima. El mundo es como un espejo, que devuelve a cada persona el reflejo de sus pensamientos. Pequeños cambios, hacen grandes diferencias, si nosotros cambiamos ciertos hábitos que no nos favorecen, por hábitos saludables, nuestra salud mejora, nuestro estado de ánimo mejora, nuestro día a día cambia y, por consiguiente, nuestra vida cambia y nuestro mundo también. 

«Acepta la responsabilidad de tu vida. Date cuenta que tú eres quien va a llegar a donde quieras ir, nadie más.            

LES BROWN 

Editado de internet  

COLOMBIANOS SIGAN INSISTIENDO EN QUE COLOMBIA SALGA ADELANTE, 

NO SIGAN LOS PASOS DE VENEZUELA.