
Por Luis Carlos Correa Restrepo
LETRA DEL VIRUS
¡Quieto, pare, no se mueva!
No es una solicitud…. es una obligación; estoy aquí para ayudarles.
A esta montaña rusa supersónica se le han acabado los rieles. Basta de aviones, trenes, escuelas, centros comerciales, encuentros. Hemos roto el torbellino frenético…de ilusiones y obligaciones que os han impedido alzar los ojos al cielo, mirar las estrellas escuchar el mar. Dejarte arrullar por el canto de los pájaros. Rodar por los prados, recoger una manzana de un árbol, sonreír a un animal en el bosque, respirar la montaña, escuchar el sentido común. Hemos tenido que romperlo.
No podéis jugar a ser Dios. Nuestra obligación es mutua, como lo ha sido siempre, poco importa si lo habéis olvidado.
Interrumpiremos esta transmisión, la infinita transmisión cacofónica de divisiones y distracciones… para traerles esta noticia: ¡No estamos bien! ninguno de nosotros todos estamos sufriendo.
El año pasado, las tormentas de fuego… que quemaron los pulmones de la tierra, no os detuvieron, ni los glaciares que se derritieron, ni vuestras ciudades que se hunden, ni la conciencia de ser el único responsable de la sexta extinción en masa.
No habéis escuchado, es difícil escuchar, estando tan ocupados, luchando para subir más y más alto en el andamio de las comodidades que os habéis construido.
Los pilares están fallando, se están arqueando bajo el peso de vuestros deseos ficticios. Os voy a ayudar. Llevaré las tormentas de fuego en vuestro cuerpo, inundaré vuestros pulmones, os aislaré como un oso polar en un iceberg a la deriva. ¿Me estáis escuchando ahora? ¡No estamos bien! ¡No soy un enemigo! Soy simplemente un mensajero ¡Soy un aliento! Soy la fuerza que restaura el equilibrio.
Ahora me tenéis que escuchar, estoy gritando para que os paréis ¡Deteneos, callad, escuchad! Ahora levantad los ojos al cielo… ¿Cómo esta? No hay más aviones, ¿cuánto necesitáis que esté bien… para disfrutar el oxígeno que respiráis?, observad el océano, ¿cómo está?, observad los ríos, ¿cómo están? observad la tierra ¿cómo esta?
Véanse ustedes mismos ¡cómo están! no puedes estar en un ecosistema enfermo.
¡PÁRATE! Muchos tienen miedo ahora, No demonices tu miedo… no os dejéis dominar, déjame que te hable, escuchad la sabiduría, aprende a sonreír con los ojos.
Os ayudaré. Si me hacéis caso.
Ascolta Dorika Montico. José Ramírez traducción.
OJO, DESPERTEMOS, NO QUEREMOS VENEZUELAS EN COLOMBIA
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