@eljodario
Si los colombianos valorarámos de mejor manera la interrelación que existe entre nuestro país y el Ecuador, las elecciones presidenciales de mañana estarían en primeras filas de medios y redes.
Pero como esa responsabilidad se la hemos dejado fundamentalmente a los nariñenses y a algunos empresarios caleños, la contienda de mañana ha pasado desapercibida, así haya sido una golpiza miserable el asesinato del candidato Villavicencio a solo dos semanas de los comicios.
Pero aunque al colombiano del común poco o nada le interese cuál clase de presidente escogerá Ecuador, la evolución de lo que suceda el domingo nos toca cada vez más esa polarización que se va haciendo evidente en la vida colombiana.
Como a la derecha nacional les parece la opción de lograr la séptima maravilla del mundo si nos inventan un Bukele, poco o nada han reparado que en la vecindad hay otra posibilidad si quien enfrenta en la segunda vuelta a Luisa González, la modesta candidata del expresidente Correa, resulta ser el estrambótico Jean Topic, hijo de franceses afincados en Guayaquil.
Con pinta de galán de televisión, a veces hasta vestido de camuflado de combate, está cosechando por estos días de angustia el haber predicado desde hace varios meses una mano dura contra la violencia y el narcotráfico en su país. Educado en la mítica Legión Francesa, mostrado como esposo y padre ideal, puede dar el batacazo contra la señora González, que no tiene cara ella de hacer algo distinto a lo que le ordena desde su exilio en Bélgica el expresidente Correa, ansioso de desquitarse de la tunda que la vieja oligarquía, aliada con los indios, le dio para sacarlo del ring.
Escuche al maestro Gustavo Alvarez Gardeazábal.
Pero quizás resulte mejor volver a Correa que experimentar con el rambo guayaquileño.
Más historias
Vistazo a los hechos: Colombia va muy mal, y la oposición peor
Contracorriente: Monseñor José Joaquín Arteaga, a 100 años de su muerte
Habilidades digitales: esenciales en la migración masiva hacia las galaxias digitales