Por William Fernando Yarce
En un país con un déficit fiscal de la magnitud actual, con la necesidad de maximizar las rentas en todos los niveles del estado, con una reforma tributaria que tocará el bolsillo de todos, resulta aberrante el diario espectáculo de ver, empezando por el Presidente de la República, la Fiscalía, la Defensoría del Pueblo, gobernadores, alcaldes, organismos de gestión de riesgos y todos los niveles de la administración pública, portando camisas, chalecos, gorras, chaquetas, todas marcadas y con logotipos de cada entidad.
Ahora en los noticieros de hoy vi casos de funcionarios de municipios Alto Baudó y Mutatá (bien escasos de recursos que son) con sus flamantes camisas y gorras marcadas. Y en las mismas emisiones el alcalde Támesis, el Gobernador (e) de Antioquia, personal de gestión de riesgos, funcionarios de Timana y el flamante Fiscal General también con sus camisas y chalecos.
¿Cuánto les vale a la nación, a los departamentos a todos nosotros esta costosa e injustificada moda?
Más historias
¿Daniel Quintero fue un protegido de Iván Duque y Francisco Barbosa?
Crónica # 876 del maestro Gardeazábal: desarman las Fuerzas Armadas
Las mujeres de la muerte de Gardeazábal