Vistazo a los hechos: Los excabecillas de las Farc, no dejan de burlarse de los colombianos…

Por Gabriel Zapata Correa 

Esta semana, en unos actos más factuosos y retóricos que representativos de una realidad, se festejaron los primeros cinco años de la firma de los acuerdos de La Habana, con la presencia de los principales protagonistas de ese hecho, que, en verdad, sí ha reportado unos grandes beneficios para los reinsertados que sí se han acogido a ellos. 

Digamos que el secretario de las Naciones Unidas, Antonio Guterrez, fue realista con Colombia aunque generoso con los excombatientes de las Farc, encabezados por Rodrigo Londoño, alias “Timochenko”, a quien vale la pena reconocer que ha sido de los pocos que mantiene la coherencia en los temas de los acuerdos. 

Pero si vamos a la realidad, basta recoger testimonios de numerosas víctimas y familiares de las víctimas, quienes coinciden en que la mayoría de estos criminales, que no han pagado ni un minuto de cárcel, continúan burlándose de los colombianos. 

Abusando de la extremada lentitud de la justicia, y de la JEP, que no ha proferido una sola condena contra ninguno de estos delincuentes confesos, varios de estos excabecillas no desaprovechan la oportunidad para expresar sus cínicas manifestaciones contra sus víctimas. 

Si nos remontamos a aquel mes de octubre de 2012, cuando Santrich era miembro del equipo negociador de paz de las Farc en La Habana y un periodista del medio TVE le preguntó que si la desmovilizada guerrilla estaba dispuesta a pedir perdón a las víctimas, y respondió con esa burla “quizás, quizás”, vemos que a la actualidad no han cambiado… 

El hecho que sean diferentes protagonistas en la misma actitud, refleja que no hay un acto de contrición de convicción. Simplemente no les importa reconocer sus crímenes y sus delitos. Solo estar libres y disfrutar la libertad y la fortuna, porque tampoco la han reconocido. 

¿O será una coincidencia que el criminal de las Farc, Rodrigo Granda, esta vez en la conmemoración de los cinco años de la firma del acuerdo de pazen la Universidad Externado, se hubiera burlado nuevamente de sus víctimas? 

Rodrigo Granda, quien era conocido como el canciller de las Farc, se refirió a la decisión de la JEP de ordenarle al antiguo secretariado de la guerrilla a aceptar que cometieron el delito de esclavitud con los secuestrados. 

Con la ironía y la desfachatez de siempre, Granda aseguró que, aunque han aceptado violaciones a los derechos humanos que se cometieron con las personas secuestradas, no aceptan haber cometido el delito de la esclavitud. 

Para completar, este soberbio criminal de las Farc se refiere a los secuestrados como “retenidos…” Y como si no le importara la repercusión en el alma de sus víctimas, soltó esta frase absolutamente repudiable: 

“Si alguna de las personas que estaba en retención decía que se sentía aburrida y que quería participar en ‘x o y’ trabajo de ahí mismo del campamento, se permitía, pero no era que fuera una obligación”. Como quien dice que esos trabajos forzados los hacían para desaburrirse. ¿Qué dirán entonces de las numerosas imágenes sobre sus vergonzosos campos de concentración, al peor estilo de los nazis? 

Estas afirmaciones las dijo en presencia del expresidente Juan Manuel Santos y de su exAlto Comisionado de Paz, Sergio Jaramillo, quienes guardaron silencio cómplice… 

Además, aseguró que no son todas las víctimas las que reconocen que existió este delito. 

Pero la burla del criminal Granda no paró allí. “¿Qué más quieren que digamos, que hagamos lo que hizo Duque de ir al muro de las lamentaciones a darse allá cabezazos? Nosotros estamos diciendo nuestras verdades, no es obligación aceptarla, pero tampoco nos pueden obligar a aceptar otras pretensiones”. 

Como se sabe, La JEP también determinó en el mes de agosto que, al menos, 18.667 menores fueron reclutados de manera ilícita por la antigua guerrilla. 

Frente a este tema, Rodrigo Granda señaló que “hay reconocimiento de que hubo menores en la guerra”, pero que “ahí también hay manipulación”. 

“En La Habana, la alta instancia para la niñez en la guerra fue porque, según sus datos, dentro de las Farc había 15.000 niños y nosotros demostramos que había 570 menores”. 

“(…) Nos quieren hacer un fusilamiento de carácter moral”, aseguró. 

Es la persistencia en negar semejantes humillaciones a las que sometieron a miles de colombianos. Fíjense que el 22 de septiembre en entrevista con BLU Radio durante el homenaje a Jorge Briceño, alias “El Mono Jojoy”, la senadora del partido Comunes, Sandra Ramírez, se refirió a la situación en la que vivían los secuestrados de la extinta guerrilla de las Farc. Y afirmó que tenían sus comodidades dentro de las cárceles de alambre en las que los tenían. 

“Dentro de esas cárceles tenían sus comodidades, pero hay que ver las cárceles del régimen cómo son, tenemos cárceles para 80.000 personas y tenemos hoy 123.000 personas. Ellos tenían sus comodidades a medida de las condiciones, su camita, su cambuche, todo”, afirmó Ramírez. 

Son tres ejemplos. Antes de firmar y los recientes que demuestran que estos tipos no tienen la convicción de haber llegado a la paz, aunque en contraste valga decir que los reinsertados trabajan en el campo, mientras sus exjefes se continúan burlando de sus víctimas. 

¿Cómo quieren que los colombianos respalden esos generosos acuerdos, en medio de semejante cinismo?