
Por Gabriel Zapata Correa (foto)
La verdad que desde que Federico Gutiérrez lanzó oficialmente su candidatura a la Alcaldía de Medellín, un nuevo aire se respira en la ciudad. Aunque no podemos caer en los falsos triunfalismos, y mucho menos él, la voz de Fico refresca el debate porque es un hombre que transmite confianza y nos envía un mensaje de esperanza muy claro, de que los buenos tiempos están por venir en Medellín.
Fico nos transmite confianza porque su hoja de vida está precedida de un amplio recorrido político y de una trayectoria diáfana en el ejercicio público, libre de todo señalamiento. Y resalta mucho más frente a la ciudad que estamos viviendo día a día, totalmente abandonada a su suerte, con un alcalde que ha pisoteado las buenas maneras y que ha tirado por la borda los principales proyectos que están íntimamente ligados con el alma de los medellinenses, como aquellos que tienen que ver con los niños, Buen Comienzo, y con el adulto mayor, por mencionar tan solo estos dos.
Pero también tenemos que decir que en esta administración hemos caído en lo más bajo en calidad de vida. Una ciudad inundada de basuras y de rastrojos en sectores que antes eran jardines y zonas verdes. Este abandono demuestra que, a este alcalde, a quien solo le restan ya escasos seis meses para que se vaya de aquí, poco le duele Medellín, y que vino a arrasar con la ciudad, con unos fines oscuros que nadie ha podido adivinar.
Por eso el discurso de Fico desde el 4 de julio que lanzó su candidatura ha sido claro y directo. “Estoy aquí con toda la convicción y con todas las ganas de volver a gobernar a mi ciudad. Y quiero hacerlo de la mano de todos ustedes, hacerlo juntos, hacerlo muy bien, hacerlo mejor”.
Fico es un político de juego limpio, transparente. Ha hecho énfasis en que es momento para la unidad, para construir proyectos comunes y respetar la diferencia desde la democracia. Invitó a todos los candidatos a que hagan campañas limpias, basadas en ideas, en valores y en el sentido común: “Colombia no va bien. Y yo no creo en una oposición que destruye sino en una oposición que construye, ¿qué mejor lugar para construir que los gobiernos locales?”.
Con Creemos, ahora partido político, que cuenta no sólo con trayectoria sino con el respaldo popular con el que Fico Gutiérrez logró la Alcaldía de Medellín en 2015 con 246.221 votos, además de dos curules en el Concejo de la ciudad, espera llegar al cargo por segunda vez.
“Quienes trabajamos en política con vocación de servir solemos ser gente irremediablemente optimista que, sin importar el caos que nos rodee, tenemos la certeza de que las cosas pueden estar mejor. Y ponemos nuestro corazón y nuestra vida al servicio de ese propósito”.
Insistió en que el país se recupera desde las regiones, con los programas sociales, la alimentación para los niños, con políticas públicas para los jóvenes y el apoyo a los emprendimientos, desde la confianza. Por eso, las alcaldías, las gobernaciones, los concejos, las asambleas son espacios locales desde los cuales se puede trabajar y que contarán con candidatos por el partido político Creemos.
Otro de los daños que ha hecho el actual acalde es polarizar la ciudad, para aplicar aquel principio, divide y reinarás. Y por eso Fico desde que se lanzó está enviando este mensaje de unidad: “No vinimos a dividir más, ya suficiente ha tenido Medellín con esta tortura que ha vivido estos casi cuatro años de división, de estigmatización a sectores que no están de acuerdo con quienes mal gobiernan, con los cuestionamientos que tienen”, señaló.
Y esta semana en otro acto político con el Centro Democrático, dijo que me voy a reunir con todos los grupos políticos y sociales que quieran trabajar por la ciudad… Nuestra tarea es sentarnos con todas las organizaciones sociales y políticas de la ciudad para que sumemos esfuerzos para llegar unidos a transformar la ciudad. Respetemos las diferencias y hagamos lo correcto que es trabajar por la ciudad”.
Con Fico nos llegó la buena hora a Medellín. Hay que recoger sus mensajes y con los demás candidatos, quienes a una sola voz quieren salvar la ciudad, fortalecer un gran bloque institucional libre de intereses personales para enviar un mensaje a quienes están saqueando el Distrito, que aquí vamos a derrotar a los corruptos y a recuperar el respeto y la dignidad.
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