24 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Vistazo a los hechos: El violento camino de la Minga

 

Por Gabriel Zapata Correa* (foto)

La Minga del sur no es un paro cualquiera. Desde 1986 a todos los gobiernos les ha tocado enfrentarla y todos se han sentado a negociar, luego del desgastante pulso de negociaciones, a través de las cuales se llegan a unos acuerdos que casi siempre se incumplen. Y la Minga vuelve y juega.

En este momento la situación es incierta. La Minga sabe cómo presionar al Gobierno de turno: Acuden al bloqueo de las principales vías del suroccidente colombiano, la vía Panamericana entre Cali y Pasto, dejando sin conexión terrestre a más de 5 departamentos y generando unas pérdidas multimillonarias muy difíciles de precisar.

Como lo plantea la periodista Diana Calderón en El País de Madrid: “Un análisis de Camilo González Posso plantea realidades que explican lo que ocurre en el Cauca, uno de los territorios que ha cobijado históricamente a los indígenas de diversas etnias. Las cifras tienen que ver con las más de 7 mil hectáreas de marihuana sembrada, la utilización de los corredores por Ecuador y Buenaventura para sacar la coca de la creciente resiembra de cultivos ilícitos en una desgraciada retoma de la zona del Pacífico por parte de disidencias de las FARC, la guerrilla del ELN, delincuentes comunes y narcotraficantes que no quieren perder las rentas ilegales, incluyendo las de la minería de oro. (Lea la columna).