20 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Sobre las verdades a medias

Francisco Luis Valderrama A.            

Respecto a la anunciada reducción de tarifas del servicio de energía que presta EPM, circula en redes, entre otras, una opinión en video del señor Luis Guillermo Velez, columnista de El Colombiano, medio rebosante de mala fe.                

Hay verdades en el planteamiento del señor Velez. Pero la premisa con la cual construye su argumento es falsa. No es cierto que las tarifas no se puedan congelar. Incluso con la legislación vigente se podrían moderar aún más.    

Una verdad a medias es un discurso tramposo. Ese postulado aplica al alcalde y también a muchos de sus detractores.  Es procedente la crítica a Quintero, pero por burlar la promesa de una rebaja tarifaria que bien pudo hacer y que ahora envuelve en huevo para aparentar cumplir una promesa electoral. Una contienda reducida a debate de alcantarilla: De un lado un alcalde irresponsable que evidentemente pretende derivar réditos políticos de la medida, y del otro, grupos económicos, políticos y medios de comunicación, con sus respectivos lameculos, al servicio de causas regresivas.                                

Hay una derecha civilista que el país necesita. Pero hay también una franja lunática, intelectualmente deshonesta que miente y sabe que miente. El señor Velez, y los grupos que representa, pertenecen al segmento “aguamasero” de esa franja.                                                    

No obstante, al margen de la pelea de cantina entre el alcalde y algunos de sus críticos (media verdad de un lado y media del otro no suman una verdad completa), vale la pena detenerse en el aumento de los servicios que presta EPM matriz en Antioquia.                      

Un experto en el tema, el Dr. Jairo Hernan Ramirez, explica que mientras el IPC subió 28% desde enero 2020 a la fecha, los servicios de energía y gas subieron 55% y 58% respectivamente, el de alcantarillado 53% y el de acueducto 73%. En consecuencia, la crítica, tanto al alcalde como al modelo tarifario, tendría que ser por permitir semejante abuso y no simplemente por frenarlo temporalmente, como hacen algunos que piensan en los negocios solo en términos de acumulación y no como generadores de riqueza COLECTIVA.

Tiene que ser muy caradura el señor Quintero para presumir que honra su promesa electoral solo por mantener, para diciembre 2023, la misma tarifa de hoy, con alivios insignificantes en el ínterin.                    En pocas palabras, una vez permitidos aumentos exagerados, muy por encima del IPC, ya el daño esta hecho. Esa torcida manera de «aliviar» las tarifas no pasa de ser una burla a la ciudadanía y una refinada expresión de cinismo que retrata de cuerpo entero, tanto al señor Quintero, como a algunos de sus detractores.