10 febrero, 2025

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Se va de Unaula el escritor y editor de editores

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La decisión de Jairo Osorio de retirarse de la Universidad Autónoma Latinoamericana, Unaula, sacude el mundo editorial de Medellín.

Es un hombre inquieto por las letras. No sabría decirse si es mejor escritor que editor, o mejor editor que escritor.

Como escritor es poseedor de una imaginación rica y ágil para seleccionar la palabra exacta que necesita para describir y recrear las escenas que está pintando. Tiene Jairo Osorio un estilo ameno y cautivador en el manejo del lenguaje y sabe, con la experiencia que lo respalda, aplicar con agilidad la información para darle utilidad a sus escritos.

Y como editor, posee asertividad para establecer la conexión entre las imágenes, los títulos y los textos, lo cual le permite ofrecer un lenguaje integral muy efectivo. Es de una recursividad insuperable para seleccionar los temas, como lo hizo por ejemplo para enriquecer la Biblioteca del ITM con temas de ciudad y educación.

Y en Unaula con unas novedades bibliográficas, no solo útiles para estudiantes y profesores, sino necesarias en el mundo editorial.

Dice Jairo que “mi vida existencial y laboral la comencé en Guayaquil en 1958, cuando a los cuatro años ya trabajaba en el bar de mi padre.

“Estoy feliz porque concluyo este camino de satisfacciones personales y profesionales como director del Fondo Editorial Unaula”.

La de Jairo Osorio fue una trayectoria de éxitos y reconocimiento general en la Gobernación de Antioquia (1980-1983), en la Biblioteca Pública Piloto (1983-1987), con el gremio bananero en Urabá (1987-1993), con el ITM (1999-2010), y finalmente con la UNAULA desde 2010.

En esas instituciones Jairo siempre puso por delante su preocupación por crear colecciones de libros que aportaran a la historia regional, y que sirvieran de referente a los historiadores y lectores colombianos.

Jairo Creó fondos editoriales por donde pasó. Son reconocidos y valiosos los del ITM y Unaula, principalmente, y en cada institución donde laboró, logró el apoyo para la edición de sus publicaciones.

Su vida de editor está llena de títulos, cerca de ochocientos en total, además de sus propios libros que ya suman cerca de veinticinco publicaciones.

El retiro de su vida laboral, estamos seguros, que no lo alejará de esa pasión por dejar en páginas impresas la escritura que le apasiona y motiva.

Para este año, por ejemplo, tiene ya listos dos nuevos volúmenes: Cámara discreta, colección de retratos de escritores, artistas y personajes públicos de la vida colombiana, y Cuba, una fiesta innombrable, el desencanto de varias generaciones con el socialismo estalinista y la dictadura de los hermanos Castro.