Salud y Estado: ¿Subiremos el precio de la salud?

Por Henri Cap Martin 

• Decisión que nos afectará a todos en 2026.

La discusión sobre la UPC – Unidad de Pago por Capitación – dejó de ser un tema de expertos. Hoy es la conversación que define si un hospital tiene médicos, si las cirugías se hacen a tiempo o si las EPS pueden entregar completos los medicamentos formulados. 

Este artículo explica, en cuatro partes, por qué la decisión sobre la UPC para 2026 es la más importante de la última década.

1. El Grito de las EPS: «El dinero no alcanza ni para lo básico»

ACEMI, el gremio que reúne a las EPS, ha dado una alerta cruda: desde 2021, el gobierno ha asignado menos dinero del que realmente cuesta atender a las usuarios.

El ajuste de 2025 fue insuficiente: El aumento fue del 5,36%, muy por debajo del alza del salario mínimo (más del 11%) y del encarecimiento de medicamentos y equipos. Según ellos, el propio estudio del gobierno decía que debía subir cerca del 16%.

Un hueco gigante: ACEMI calcula que entre 2021 y 2025, el sistema acumula un déficit de más de 30 billones de pesos. Es como si tu salario cubriera solo el 80% de tus gastos mensuales, y la deuda creciera cada mes.

Consecuencias que tú sientes: Por esta falta de dinero, las EPS pagan tarde a clínicas y hospitales, estos reducen servicios, aumentan las listas de espera y se dificulta el acceso a cirugías o especialistas.

Su advertencia es clara: «Con una UPC insuficiente no hay sistema que aguante». 

2. La Corte Constitucional (CC) Pone Orden: No es una sugerencia, es una orden. 

La CC expidió un fallo histórico: declaró insuficientes las UPC de 2024 y 2025.

La Corte no solo criticó, sino que ordenó al gobierno:

1. Recalcular el valor de esos años.

2. Reparar el dinero que faltó reconocer en el pasado.

3. Crear una mesa técnica con EPS, hospitales, pacientes y expertos para que el cálculo sea transparente y técnico, no político.

El mensaje es inédito: El derecho a la salud no se puede recortar por ajustes fiscales. El cálculo debe ser real. 

3. La Encrucijada de 2026: ¿Qué está pasando tras bambalinas?

El Ministerio de Salud debe publicar el nuevo valor de la UPC para 2026 antes del 31 de diciembre de este año.

¿Qué pide el sector?

– EPS y Hospitales: Un aumento de dos dígitos (entre 14% y 18%) para empezar a cerrar el hueco histórico y cubrir costos reales.

– Expertos: Coinciden en que hay un rezago acumulado y que las enfermedades de alto costo (cáncer, renales, entre otras.) presionan más cada año.

– La Tensión del Gobierno: Está entre la espada (la orden judicial de la Corte) y la pared (el límite del presupuesto nacional). El Ministro de Hacienda ha dicho que la salud «está financiada», pero ese cálculo no incluye el aumento real que exige la Corte.

– El Escenario Más Probable: Se rumora un aumento entre 8% y 12%. Para los técnicos, esto no solucionaría el déficit acumulado, solo evitaría que se hiciera más grande. Sería un parche, no una solución. Con esto el gobierno no cumpliría la orden de la CC. 

4. Lo que el Sistema Necesita.

No se trata solo de subir un porcentaje. Se necesita un cambio estructural.

– Un Ajuste Real, No Cosmético: Que cubra el costo verdadero de los salarios, los medicamentos y la tecnología. Operar con pérdidas (siniestralidad >100%) es matemáticamente imposible.

– Transparencia Total: Que la metodología de cálculo sea pública. Que todos podamos ver en qué se basan las cifras.

– Un Pacto Nacional: Un acuerdo entre gobierno, EPS, hospitales y ciudadanos para ordenar el sistema, reducir gastos innecesarios, pero financiar lo que sí es esencial.

– Un Mensaje Claro Para Todos: Si la UPC es insuficiente → Las EPS no tienen liquidez → Los hospitales no son pagados → Aumentan las listas de espera y se cierran servicios → Tú, con tu tutela en mano, buscas lo que el sistema no puede darte.

Conclusión: El Punto de Quiebre

Diciembre de 2025 no será un mes cualquiera. El decreto de la UPC 2026 definirá si Colombia empieza a sanear la financiación de su salud o si profundiza la crisis con otro parche.

Lo que está en juego no es un número en un documento oficial. Es la posibilidad de que 50 millones de colombianos tengan garantizado un sistema que responda cuando más lo necesiten.

Cuando la UPC es insuficiente, el sistema se vuelve insostenible. Cuando se ajusta a la realidad, es posible construir un camino de recuperación. En unas semanas, sabremos qué camino elige el gobierno para el país.