El presidente rechaza la propuesta de un aliado de su propio partido para reabrir temporalmente la Administración estadounidense
Por Yolanda Monge.
El País de Madrid. Whasington.
Más de tres semanas de cierre parcial de Gobierno no han hecho cambiar de opinión a Trump respecto a su posición para conseguir de forma extraordinaria 5.700 millones de dólares para financiar la construcción del muro entre Estados Unidos y México. Aunque el cierre podría acabar costando más que esa cifra a la primera potencia mundial y más de 800.000 trabajadores públicos siguen sin recibir su salario, el presidente estadounidense sigue sin reaccionar.
Pero ambos datos sumados han abierto las primeras grietas dentro de las filas republicanas, con el llamamiento durante el fin de semana del senador Lindsey Graham para reabrir temporalmente la Administración.
Este lunes, Donald Trump rechazaba de plano esa posibilidad. En declaraciones a las puertas de una Casa Blanca cubierta de nieve y poco antes de iniciar un viaje a Luisiana, el mandatario afirmó no compartir la propuesta de Graham de reabrir el Gobierno durante tres semanas para negociar con los demócratas. (Lea el informe).
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