Las expediciones en la Ciudad de los Libros terminaron ayer, domingo, en el cierre de la Fiesta del Libro y la Cultura en su décima tercera edición, pero se mantendrán vivas durante el resto del año a través de las historias de libros y de lectores que viajarán desde la Zona Norte a todos los barrios de Medellín.
La Fiesta cumplió el sueño de tener su propia biblioteca. La obra Pinocho, de Carlo Collodi, se convirtió en el título cero de esta colección que se presentó en el evento y que congregó a leerla en voz alta y compartirla. De él se repartieron unos 4.000 ejemplares de forma gratuita.
Jardín Lectura Viva, corazón de los Eventos del Libro, reunió a 42 entidades que ofrecieron alrededor de 2.500 talleres. Fueron 121.550 personas, entre público general y estudiantes. Allí, por primera vez, en la librería, los niños pudieron vivir la experiencia de elegir y comprar libros a precios bajos. 2.346 obras ahora están en manos de pequeños lectores.
La secretaria de Cultura Ciudadana, Lina María Botero Villa, resaltó que este evento es un modelo para toda la ciudad: “quisiéramos que Medellín se pareciera cada vez más a esta Ciudad de los Libros, donde los escenarios públicos son de todos, a la que se llega en transporte público, en la que vemos niños en brazos y de todas las edades. Vivimos diez días de mucha alegría. Lo que nos queda es seguir cuidando eventos y escenarios como estos para que sigan creciendo”.
La programación cautivó a 71.100 visitantes quienes acudieron a encuentros con escritores, músicos, ilustradores, dibujantes de cómic, editores, libreros, antropólogos, entre otros. En total, 400 invitados nacionales e internacionales de 18 países fueron convocados a esta edición.
Chile, como país invitado, dio una gran muestra de su bibliodiversidad en Medellín, gracias a una delegación que participó en conversaciones, conciertos, exposiciones, talleres, lecturas en voz alta, seminarios, entre otras experiencias.
Ricardo Hernández Menéndez, embajador de Chile, expresó su agradecimiento por permitir que la cultura de su país fuera la invitada: “Hicimos una travesía, trayendo a una tripulación de 40 integrantes entre escritores, ilustradores, editores y otros más vinculados con el mundo de las letras. Ellos permitieron que se hicieran presentes más de 4.000 títulos en nuestra librería y dos exposiciones”.
Se realizaron 195 lanzamientos y 103 instituciones educativas públicas y privadas, bibliotecas y otras entidades se beneficiaron con Adopta a un autor, un programa que al finalizar 2019 habrá permitido que unos 18.500 alumnos y ciudadanía en general se encuentren con el escritor de la obra que leyeron durante el año.
El IV Premio León de Greiff al Mérito Literario le fue otorgado al escritor puertorriqueño Edgardo Rodríguez Juliá, autor de más de 20 libros de crónicas, ensayos y novelas, quien recibió la distinción por recoger en su producción el legado del Caribe y explorar temáticas como la migración a Estados Unidos.
Para Diego Aristizábal, director de los Eventos del Libro, experiencias como la de la Librería Jardín Lectura Viva o la Biblioteca Fiesta del Libro y la Cultura resumen lo que pasó en estos diez días: “El hecho de invitar a la gente a que, antes de llevarse el texto para la casa, lo lea en voz alta y lo comparta con otros, es una demostración de que las personas quieren leer y que esta ciudad se está enamorando de los libros”.
La Alcaldía de Medellín agradece a todos los visitantes por hacer parte de esta celebración que tuvo en el libro y la cultura una oportunidad para propiciar el diálogo, el encuentro ciudadano y la construcción de pensamientos críticos y diversos, un espacio para festejar la palabra en todas sus manifestaciones y para explorar diversas formas de leer. (foto fiesta del libro).
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