19 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

¿Los colombianos pagaron impuesto predial en 2020?

Julian Santiago Vasquez

Por Julián Santiago Vásquez Roldán 

Gerente de Idea 

Luego de revisar las cifras reportadas por 31 de las 32 capitales (sin incluir a San Andrés), en el Consolidador de Hacienda e Información Pública -CHIP 2020, los contribuyentes con propiedades en ciudades capitales no solo honraron sus compromisos con el predial, sino que el recaudo incrementó en $175.805 millones en 21 ciudades capitales. De estas, cuatro representan cerca de 65% de ese incremento: Cartagena $45.025 millones; Cali $31.355 millones; Medellín $22.960 millones y Pereira $16.055 millones. 

Por su parte, en las 10 ciudades capitales restantes, se vio disminuido el recaudo en $191.187 millones, de los cuales Bogotá explica $106.639 millones (56% del total). Pese a lo anterior, la cifra de recaudo de impuesto predial 2020 con respecto a 2019 solo disminuyó en $15.382 millones en el total de las ciudades capitales del país analizadas. 

En un año con pandemia, confinamiento, cierre de empresas, pérdida de empleos y disminución de ingresos; sorprende que el comportamiento del recaudo de impuesto predial sea tan favorable para algunas ciudades capitales. Las razones que pueden explicar este resultado, podrían ser resumidas en tres escenarios: Un primer escenario explicado por un ejercicio de conservación catastral (mantener al día los predios en aspectos físicos, jurídicos, económicos y fiscales) lo que pudo significar este desempeño del recaudo; un segundo escenario enmarcado en que, a pesar de las múltiples dificultades que enfrenta el país, existe una cultura de pago de impuestos por parte de las empresas y de las personas, lo cual favoreció el resultado del recaudo de predial 2020 y un tercer escenario, pudo ser una posible contrastación de la teoría con el resultado de las propuestas planteadas por el profesor Arthur Laffer en 1978 acerca de la rebaja del impuesto sobre la propiedad. 

De esta manera y reinterpretando a Laffer, es posible que ante el descenso de la actividad económica y la pérdida de empleo durante 2020, el Gobierno Nacional (vía promulgación del decreto 678 de mayo de 2020) y los mandatarios locales (vía aplicación del decreto mencionado), entendieron que debían diseñar estrategias tributarias en favor de evitar la disminución del recaudo e incentivar la economía, al tiempo que los contribuyentes aprovecharon estos descuentos de pago, lo que permitió que 21 ciudades capitales lograran incrementar el recaudo. 

Finalmente, y atendiendo la invitación del exministro de hacienda Mauricio Cárdenas, lo que si queda muy claro en cualquier escenario es que “Debemos ir más allá de buenas ideas y contribuir activamente a la creación de consensos”. En este sentido, Colombia requiere de una nueva estructura de las finanzas públicas para sus municipios y departamentos, que favorezca la autonomía territorial, impulse la economía regional y materialice instrumentos de desarrollo que construyan equidad intergeneracional. 

No es posible el cierre de brechas en el siglo XXI con instrumentos del siglo XX. Por lo pronto, desde ya se debe pensar en un nuevo decreto que mejore y extienda el 678 y que le de flexibilidad a los entes territoriales para que, en medio de la pandemia, puedan mantener buenos niveles de recaudo para atender la emergencia sanitaria y cumplir sus planes de desarrollo.