29 marzo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

La hora del planeta: cuidarlo para salvarnos todos de la extinción

Por Enrique E. Batista J., Ph. D. 

https://paideianueva.blogspot.com/

«Si todos los animales fueran exterminados, el hombre también perecería entre una enorme soledad espiritual» – Gran Jefe Piel Roja Jefe Indio Seattle en 1854.

Si no cuidamos el planeta y tampoco eliminamos los gases de efecto invernadero, nos avocamos, sin remedio, a una extinción masiva de las especies vivas, incluidos nosotros los humanos-

Otra vez, es este mes de marzo, es «La Hora del Planeta». Retomo algunas ideas expresadas antes en algunos de mis artículos, entre ellas el hecho cierto que debe conmover la conciencia de todos porque con nuestra vida en el planeta estamos jugando un tiempo suplementario. El Gran Jefe Piel Roja, Seattle, en carta dirigida en 1854 año presidente  Franklin Pierce, de los Estados Unidos, bien le señaló que: «el daño que le estamos haciendo hoy al planeta lo padecerán las generaciones futuras, nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos si antes, por culpa y omisión nuestra, no acabamos extintos como especie… La tierra debe ser respetada. Enseñen a sus hijos lo que los nuestros ya saben, que la tierra es nuestra madre. Lo que la tierra padezca será padecido por sus hijos». (https://rb.gy/6peiav).

También es preciso recordar que nuestra supervivencia en el planeta depende de una pequeña y dulce criatura de Dios, la abeja, no sólo nos dan su miel, sino que son esenciales para mantener la biodiversidad en el planeta y la producción de alimentos.

La extinción hoy es una posibilidad altísima que debemos considerar todos los humanos. No seremos lo primeros humanos en quedar extintos. En el pasado, varias de las especies de humanos se han extinguido, entre ellas, las de los Neandertales y Denisovanos.

Uno de los hechos que los niños y jóvenes de la Generación 8G enfrentarán es la sexta extinción masiva en la historia de la Tierra. En la tercera de ellas, hace  251 millones de años, se extinguió el 95% de la vida terrestre, denominada  la extinción del  período geológico Pérmico-Triásico; ha sido la  extinción masiva mayor. En la cuarta, hace 210 millones de años, se extinguieron muchos vertebrados, permitiendo el surgimiento de los dinosaurios. En la siguiente, y última hasta ahora, (hace 65 millones de años) se extinguieron los dinosaurios y el 18% de los vertebrados, así como otra variedad amplia de animales terrestres y marinos, llegando en su conjunto a la mitad de los seres vivos; todo animal de más de 20 kilogramos desapareció.  Esas cinco extinciones masivas ocurrieron por violentos cambios climáticos, intensa actividad volcánica, elevación del nivel del mar y por meteoritos inmensos. Se ha dicho que las especies siempre se extinguen; los humanos no somos la excepción, como se ha indicado. En efecto: «Las especies se extinguen todo el tiempo. Los científicos calculan que por lo menos el 99.9 por ciento de todas las especies de animales y plantas que alguna vez existieron ahora están extintas». (https://rb.gy/kncwl7,  https://rb.gy/tl88u1).

Ya traspasamos la puerta de entrada a la sexta extinción masiva, ahora de origen antropogénico  (creada por acción de los humanos sobre el planeta); la mitad de las especies vivas hoy se extinguirán antes de  cien años: Entre ellas, un tercio de los anfibios,  una cuarta parte de los mamíferos, cerca del 15% de las aves y dos tercios de las plantas. A lo que se agrega la consideración de los cambios en los diferentes ecosistemas, mutaciones en los genes, reducción en la diversidad genética de productos agrícolas, disminución en el tamaño de distintas especies, surgimiento de nuevos patógenos, reducción de selvas y praderas todo lo cual significa un futuro difícil para los humanos. (https://rb.gy/k6wkkjhttps://rb.gy/kcaqz4).

Algunos de los impactos en América Latina y el Caribe lo ha señalado el profesor Eduardo Uribe Botero, quien destaca la afectación a cuántos tipos de bosques, arrecifes y humedales existen, la disminución del tamaño de anfibios y mamíferos acuáticos, extinción de  reptiles, tortugas y  ranas,  extinción de especies controladoras biológicas de plagas que afectarían los sistemas agrícolas;  se anticipa que, con el calentamiento global, en unos cuantos años algunas especies de cocodrilos sólo producirán machos; se prevé también variaciones en la distribución de algunas especies, afectación  de los  ecosistemas de páramos lagunas y bosques altos andinos,  reducción en los rendimientos de la producción agrícola esenciales para la alimentación humana y de animales, así como reducción en la oferta de bienes y servicios que distintos ecosistemas aportan a la sociedad. (https://rb.gy/soka9v).

En Suramérica, 4.445 especies se encuentran amenazadas, y en el caso de Colombia, un país reconocido por su amplia biodiversidad, esa cifra es de 1.203 especies: 173 en peligro crítico, 390 en peligro y 640 vulnerables. (https://rb.gy/jpyypa). La «Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza -UICN», presenta la siguiente información basada en sus estudios científicos: el 28% de las especies estudiadas están amenazadas de extinción; entre ellas, el 41% de los anfibios, el 27% de mamíferos, el 34% de las coníferas, el 13% de las aves, el 37% de los tiburones y rayas, el 36% de los arrecifes de coral (recuérdese que son especies vivas y no rocas), crustáceos 28 %, reptiles 21% y cícadas (una familia de plantas) 69%. (https://www.iucnredlist.org/es/

«La Hora del Planeta» se celebra el último sábado de cada mes de marzo, alrededor del equinoccio de primavera, con la intención de crear una oportunidad para que todos reflexionemos y adquiramos compromisos para la protección del planeta. Esta conmemoración la lidera el «Fondo Mundial para la Naturaleza» («World Wild Fund – WWF»). Es, a la vez, una invitación a cambios en nuestros modos de vida en el planeta, reconocer que todos afectamos a la naturaleza, pero que también, somos la parte más importante frente a las soluciones requeridas. (https://rb.gy/fn9uuz).

En la página web de la WWF se presentan instrucciones sencillas para facilitar que todos, niños, jóvenes y adultos, contribuyan a la protección del medio ambiente con el fin de asegurar un futuro cierto y ambientalmente sano para la especie humana con la superación de los efectos del cambio climático y la pérdida de biomasa.

La celebración de «La Hora del Planeta» se complementa, entre otros, con «El Día Internacional de la Madre Tierra (Earth Day)», liderado por la Naciones Unidas, con eventos en el mundo cada 22 de abril.  Ambos tienen como intención crear acciones y promover legislación para salvar al planeta y librarnos de la sexta extinción masiva.