“Hay que darles paso a otras generaciones”: José Obdulio Gaviria

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Panorama.político.co 

Desde su residencia en el Aburrá Norte, donde vive hace muchos años, el senador del Centro Democrático, José Obdulio Gaviria Vélez dijo que en materia de salud se encuentra como un roble y reveló que no aspirara por tercera vez al Senado. 

“Ya está bien con dos periodos. Hay que darles paso a otras generaciones. Nosotros a fortalecer lo construido”, respondió tras ser consultado por panoramapolitico.co por su futuro y planes electorales para el 2022, cuando se realizarán en marzo los comicios legislativos. 

Al ser interrogado sobre un eventual papel electoral que podría cumplir en el 2022 Tomás Uribe, hijo del expresidente Álvaro Uribe, el ideólogo del uribismo dijo que “hay mucha expectativa con Tomás. Ha mostrado “filo” y espuelas. Pero entrar en el campo es cosa que decide él y solo él. Si lo hace, te anticipo que se pone en la primera línea de los de su generación y por delante de casi todos los cuarentones y cincuentones. Tomás todavía es ‘treintañero’. O sea que eso, a esperar”. 

Pero al insistirle más sobre ese asunto de Tomás Uribe, José Obdulio Gaviria se explayó en que “aunque Álvaro Uribe sea tan enfático y descarte al 100% esa candidatura (presidencial), no ven a Tomás tan definido y negado. En lo del Congreso sí no tiene ningún interés. Mi opinión: Tomás es elegible. Garantizaría continuar con la tarea modernizadora y de desarrollo que comenzó en 2002 y está redondeando Duque. Muy bueno y muy fácil para un país escoger entre un emprendedor de vocación y un destructor por temperamento. Pronosticaría un 80% de los votos para el primero y 20% para el segundo. Por eso no descartaría una candidatura de Tomás”.  

Gaviria Vélez también nos llamó la atención que en el obituario del resumen del año de panoramapolitico.co por Nacho, se nos pasó por alto el fallecimiento este año del excongresista Elkin García Castrillón, quien fuera el jefe guerrista de Turbo y hasta de Urabá, en los 80 y 90, gran amigo de don Octavio Soto y frecuente cliente de su inolvidable Restaurante el Mesón del Diamante, donde sostuvimos animadas tertulias políticas. Don Elkin después fue prietista y terminó uribista.