24 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

El Sena y la Cuarta Revolución Industrial en la Escuela de Verano UPB Da Vinci 500 @EstradaCarlosM @upbcolombia

 

En la Universidad Pontificia Bolivariana, en su Ecocampus Laureles, con la participación del Director General del Sena, el antioqueño Carlos Mario Estrada, El Director del Centro para La Cuarta Revolución Agostinho Almeida y Guillermo Foladori Investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México entre otros importantes participantes, se dio inicio el pasado lunes 10 de Junio a la agenda académica de La Escuela de Verano UPB Da Vinci 500.

En este importante evento, Carlos Mario Estrada (foto Estrada en la UPB) hizo un  amplio recuento de los importantes retos que tiene El Sena para enfrentar los desafíos de la Cuarta Revolución Industrial. Al respecto señaló que dada la situación en que encontró la institución, le va a tocar saltarse una revolución para estar a tono con los grandes cambios que demanda  la sociedad actual.

Añadió  Carlos Mario que el Sena cuenta con más de 40 mil empleados, un presupuesto de 1.300 millones de dólares y el gran reto de formar a 650 mil colombianos, para cumplir la meta que le ha trazado el gobierno del Presidente Iván Duque.

La principal reflexión  de este encuentro es que la 4RI nos obliga a todos a reinventarnos, pues estamos teniendo cada vez cambios más grandes y más rápidos. Vemos nuevos desarrollos disruptivos en temas como: movilidad, el campo laboral, la salud, sistema financiero, internet de las cosas, blockchain, impresionantes 3D, hotelería, servicios de vigilancia, el retail y la educación. Todo con un componente de tecnología, donde los desarrollos de la inteligencia artificial, permiten que los robots o los computadores hagan muchas de las actividades que hasta ahora venían desarrollando los humanos.

Pero dentro de toda esta transición, hay grandes oportunidades. Habrá un cambio en la empleabilidad, todo se va a desmaterializar, la irrupción de lo digital, nuevos desafíos jurídicos, y la discusión ética sobre el impacto de los avances tecnológicos y en particular los avances genéticos. También aparece la ciberseguridad, donde es de resaltar el desarrollo de  un pequeño país de un millón de habitantes,  donde todo es digital. Así mismo aparecen las competencias socioemocionales y las habilidades blandas asociadas con la personalidad y naturaleza del individuo como liderazgo, comunicación, pensamiento crítico y resiliencia. Finalmente la conclusión es según Carlos Mario Estrada: ”Hay que repensarse ya. El mundo cambió”