El crecimiento económico de Colombia 2020

Por Javier Hoyos 

·         Los principales organismos internacionales estiman para el 2020 una caída de la economía mundial entre el -4.5 y el -5% como consecuencia de la pandemia, y una recuperación para el 2021. Sin embargo, el mundo enfrenta una segunda ola o rebrote del COVID-19 con un mayor número de contagios que ha obligado a los países a tomar nuevamente precauciones y restricciones, lo cual puede afectar el crecimiento del último trimestre y el consolidado anual. 

·         La mayoría de los países han mejorado su actividad económica a lo largo de los trimestres del año como consecuencia de la flexibilización y apertura de las diferentes actividades económicas. 

·         En Colombia, el PIB del tercer trimestre disminuyó el -9% y, en el acumulado de enero a septiembre, el -8.1%. La mayoría de los sectores han mejorado su actividad desde el mes de mayo. Del lado del gasto, la demanda se contrajo en -9.5% en el tercer trimestre. El consumo final disminuyó el -7%, con mayor caída en el consumo de los hogares (particularmente en bienes durables) y se registra un aumento del consumo del gobierno (ante un mayor gasto para enfrentar la pandemia). La inversión, las exportaciones y las importaciones mostraron disminuciones importantes. 

·         Las reservas internacionales en el 2020 se han mantenido superiores a las registrada el año pasado y bordean los 57 mil millones de dólares. La TRM ha tenido fuertes oscilaciones ante la incertidumbre y expectativas que generó la expansión del COVID 19 y por los cambios bruscos en los precios del petróleo. Las remesas muestran sorprendentemente buenos resultados. 

·         La inflación se encuentra por debajo del rango meta establecido por el Banco de la República, la menor demanda es uno de los factores que explica el mejor desempeño de los precios y hemos contado con buena oferta de alimentos. 

·         Las perspectivas para el cuarto trimestre y para el 2021 se muestran mejores. Restablecer la confianza será clave, pero ello dependerá de la oportunidad con que se obtenga la vacuna y de la intensidad de los nuevos contagios o rebrotes, y de sí vendrían o no nuevos confinamientos o restricciones a la movilidad. 

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