29 marzo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

El canal del Dique

Jose Hilario Lopez

Por José Hilario López 

En anteriores columnas abordé el problema de las altas tasas de erosión en la macro cuenca hidrográfica Magdalena – Cauca, que junto con el cambio climático son la causa de la sedimentación del lecho de los ríos y de las ciénagas circundantes, y consecuentes inundaciones principalmente en las subregiones de la Mojana y del canal del Dique, así como el mayor problema para reactivar la navegabilidad del río Magdalena. Ahora me propongo analizar el proyecto que está desarrollando la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) para la “Restauración de los Ecosistemas Degradados del Canal del Dique (REDCD)”.      

La mayor obra de ingeniería en la Nueva Granada fue la apertura entre 1649 y 1651 del canal del Dique, que conectó el río Magdalena con la bahía de Cartagena, a través del sistema de ciénagas existente a lo largo de 115 kilómetros de longitud (Ver mapa).  En la construcción del canal trabajaron el cartagenero Antonio de Narváez, quien había obtenido el título de ingeniero en España y el maestro Pedro Zapata, quienes por primera vez en estas tierras utilizaron las técnicas de agrimensura y los cálculos hidráulicos.

Históricamente el canal del Dique ha posibilitado la conectividad del país con el mundo exterior, pero por causa de las recurrentes inundaciones a las poblaciones ribereñas y la acelerada sedimentación de la bahía de Cartagena, a partir del Siglo XX está generando un verdadero desastre ambiental, tal como lo documenta el exministro del Ambiente José Vicente Mogollón en su libro “La increíble y triste historia del canal del Dique”.

En la macro cuenca Magdalena-Cauca, donde se concentra la mayor cantidad de la población colombiana, un 73% de la superficie está afectada con algún grado de erosión, en el cual se incluyen 2 millones de hectáreas (7,5% del área total de la macro cuenca) con afectaciones de severas a muy severas. Según Enrique Forero, actual presidente de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, el río Magdalena pasó de transportar anualmente 144 millones de toneladas de sedimentos entre los años 1970 y 2000, a 188 millones de toneladas/año en el 2013; de este total, 9,5 millones de toneladas se depositan en la bahía de Cartagena (La ANI estima este tonelaje en 7,2 millones). Uno de los graves efectos de esta sedimentación es la muerte de los corales, hasta el punto que Parques Nacionales Naturales calcula que el arrecife coralino de la bahía de Cartagena se ha reducido en más del 35% (datos de 2017).

Tras varios aplazamientos, el pasado 7 de diciembre la ANI adjudicó el REDCD a la empresa española Sacyr; más tarde encargó la interventoría de este a una empresa de ingeniería colombiana, por un valor de $74.800.819.095. La firma del acta de inicio del proyecto finalmente se dio el pasado mes de abril. Se espera que durante el segundo semestre del presente año empiece la construcción de las obras contratadas.

Alcance del proyecto

El REDCD se fundamenta en el análisis del comportamiento del Sistema Canal del Dique (SCD) durante las temporadas de aguas bajas. Con la construcción de una compuerta en Calamar (ver mapa) se busca reducir el caudal a niveles más bajos, pero suficientes para la navegación por el canal. Los principales efectos esperados con esta intervención serían (escueto resumen): 1) Reducción del caudal que entre al SCD hasta el nivel mínimo requerido para la navegación y demás funciones y 2) Disminuir al máximo la entrada de agua y sedimentos del SCD a la bahía de Cartagena.

Adicionalmente se rehabilitarán las conexiones naturales del canal con las ciénagas circundantes, con lo que se espera restablecer la circulación del agua en el SCD hasta la situación existente antes del año de 1952.

Impactos ambientales benéficos del proyecto

·      Recuperación del área protegida del Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo: la entrada de sedimentos y de agua dulce a mayor temperatura al ecosistema marino han estado afectado los corales, algas y demás especies asociadas

·      Recuperación del calado del puerto de Cartagena, que está siendo afectado por la acumulación de sedimentos

·      Reducción del riesgo por inundaciones en las poblaciones ribereñas del canal

·      Disminución de la contaminación en la bahía de Cartagena con metales pesados y coliformes, los cuales en parte provienen de los vertimientos industriales en el canal del Dique y de las aguas residuales (domésticas e industriales)

·      Asegurar el suministro de agua dulce para las poblaciones ribereñas y para la ciudad de Cartagena

En conclusión, el REDCD será la gran obra que beneficie a las comunidades ribereñas del canal del Dique, así como la recuperación de los ecosistemas de la bahía de Cartagena, nuestra perla del Caribe.

Canal del Dique, línea en color naranja. En negro cuerpos de agua.