El alcalde de Apartadó Felipe Cañizalez, censura a El Heraldo de URABA

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En una afrenta en contra de la libertad de prensa y censura al periódico El Heraldo de Urabá, se ha convertido la discriminación permanente contra este medio del alcalde de Apartadó, Felipe Cañizalez 

El domingo 20 de noviembre Cañizalez cito a varios medios de comunicación local a un almuerzo en un restaurante para explicarles cómo iba ser la agenda del Presidente Iván Duque a la región de Urabá, quien llegaba acompañado del Secretario General de la ONU, Antonio Guterrez, para conmemorar los cinco años la firma de los Acuerdos de Paz con las Farc. 

Durante la reunión les habló de la acreditación que deberían tener los medios escogidos por él para acompañar dicho evento. La convocatoria fue hecha por Nixa Zuluaga jefe de Comunicaciones de la alcaldía, a quién éste le pidió no invitar al periódico El Heraldo de Urabá. 

El lunes 21, la directora Hortensia Castro Hernández se comunicó con Eugeth, encargada de recibir las acreditaciones que luego eran enviadas a los hombres de Seguridad de Palacio, encargados de verificar el listado de las personas acreditadas. 

Pero le dijeron que no insistiera porque de la Alcaldía habían escogido diez medios, “y que no insistiera”. 

Ante la negativa de no aparecer en el listado oficial que había enviado la Alcaldía, “me comuniqué con un alto funcionario de Presidencia de la República, quien amablemente me dijo que inscribiría mi acreditación”. 

“Confiada, el 23 de noviembre me presenté al Parque Zungo donde se llevaría a cabo la ceremonia, y el primero que se me acercó fue Luis Jiménez, un empleado de la alcaldía, quien inmediatamente me vio llegar, se dirigió hacia mí con un listado en la mano y me dijo: “señora Hortensia, usted no está acreditada”. Le contesté, no se preocupe que yo ingreso por otro conducto regular”. 

Dice doña Hortensia que “en la portería un oficial de seguridad de Presidencia dirigía la operación de ingreso de las personas que iban llegando. Un hombre déspota, descortés, que al parecer había recibido instrucciones de Felipe Cañizalez y de Nixa Zuluaga de Comunicaciones, sumada a lo descortés de la periodista Eugeth de la oficina de Presidencia, quien además al parecer me habían referenciado mal”. 

“Luego de una hora, después de hablar con el alto funcionario, logré ingresar, con la desilusión de encontrarme que los periodistas los tenían apiñados en un área de 3 metros x 3 metros donde había unos 15 periodistas, que parecían como en un campo de concentración”. 

“La discriminación de la periodista Eugeth, fue más humillante, cuando todo el tiempo, daba órdenes de que “no nos podíamos mover de ese espacio, no se podía caminar por los alrededores, no se podía hacer entrevistas, que no iba a ver rueda de prensa”, un trato indignante para con y la prensa”, dijo. 

“Lo que está haciendo Felipe Cañizalez, de discriminar y censurar el periódico EL Heraldo de Urabá, atenta contra la libertad de prensa. El mismo 22 de noviembre, escalé la denuncia a la FLIP, para que se tomen las medidas correctivas”.