24 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Duque le pide a la cúpula de la exFarc que devuelvan las curules del Congreso

@IvanDuque 

En una clara y durísima intervención en Coveñas, Sucre, el presidente Duque les pidió a los excabecillas criminales de la extinta Farc que entregue las curules del Congreso, porque es inaceptable que “pretenden preservarlas aun siendo señalados o acusados de crímenes de lesa humanidad”.  

“… en la gran mayoría de procesos de paz que se han adelantado en Colombia, a lo largo de los últimos 100 años, siempre ha estado presente esa palabrita maldita que se llama impunidad. Después de la Guerra fratricida de los mil días, nunca hubo condenados por crímenes del deleznables. Después de la violencia bipartidista en los años 40 y 50, nunca se vio una condena ejemplar y clara frente a los que cometieron los más abominables crímenes. Después vimos las primeras expresiones de las mal llamadas guerrillas, muchas de las cuales entraron con posterioridad a procesos de desmovilización, desarme y reinserción, producto de negociaciones, y nunca se presentaron condenas ejemplarizantes a quienes cometieron los más graves crímenes”. 

Y luego dijo:“… Y recientemente, hemos visto, también, que la figura de lo que se conoce como Justicia restaurativa, también, tiene un halo, donde se sacrifica la sanción ejemplarizante del delito en aras de lo que se ha denominado la plena verdad. Pero el problema es que cada vez que ocurre impunidad, cada vez que se materializa impunidad, esa impunidad se convierte en partera, en principio de inicios de nuevas formas de violencia. Y por eso, en la concepción de la Paz con Legalidad nosotros entendemos la voluntad y el proceso de reincorporación de las bases… Pero lo que clamamos, porque afortunadamente hay desarrollo claro del Derecho Internacional, es que los principios de Verdad, Justicia, Reparación y no Repetición se traduzcan en sanciones ejemplarizantes y proporcionales a quienes han cometido los más graves crímenes de lesa humanidad”. 

El presidente Duque remató así su categ+Orica intervención: “… el mínimo gesto de gallardía, el mínimo gesto de verdadera reparación y de asumir responsabilidades es que salgan del ejercicio de esa función parlamentaria. Y decir esto no significa ser enemigo de la paz. Significa ser amigo de la justicia y ser enemigo de la impunidad. También, soy claro, en que es conocido por todos nosotros que en la justicia restaurativa se habla de penas alternativas, es cierto, que se habla de penas que no necesariamente implican una condición intramural convencional, es cierto, todo eso se puede entender. Pero lo que no se puede entender es que tengamos un doble rasero en Colombia, donde cualquiera que haya cometido un delito que implique sanción no puede jamás aspirar al Congreso de la República…”