16 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Crónica # 27 del maestro Gardeazábal: Un trance muy difícil

@eljodario

Antes del sábado le aplicarán la segunda dosis de quimioterapia a la gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, dentro del terrorífico tratamiento que le han recetado sus médicos para combatir el cáncer linfático que le afecta. Para quienes hemos desempeñado ese cargo. Para quienes hemos tenido gente muy cercana a los afectos que han soportado con dignidad las molestias en escala que genera la quimioterapia. Para cualquier ser humano que haya sido sometido a cualquiera de las varias clases que recetan de ese medicamento, los días que debe estar pasando la gobernadora del Valle sin dejar de ejercer diariamente el cargo y de estar pendiente de todos los detalles y perendengues que conlleva gobernar desde el Palacio de San Francisco a un departamento tan complejo y tan lleno de ciudades, es un trance muy difícil.

La gobernadora, para su consuelo espiritual, es una persona que posee una gran fe en la Virgen de Fátima. A su santuario en Portugal acudió con su secretaria privada, la doctora Sandra, dos semanas después de haber sido elegida para dar gracias a su Virgen protectora. La semana pasada su hijo mayor le llevó los caballeros de la Virgen y la imagen de la Señora de Fátima que se venera en el santuario que tienen en el barrio Granada de Cali. Pero a su vez, para tranquilidad de los vallecaucanos, la gobernadora ha demostrado en los 10 meses que lleva en el cargo, y lo ha resaltado por estos días de la enfermedad, que posee una voluntad recia para enfrentar vicisitudes y una capacidad de cariñosa gallina papujona o de diligente ama de casa, ordenada, previsiva y, en especial, conocedora de todos los elementos a su disposición para usar como herramientas metafóricas en su gesta de gobierno por encima de las angustias que soporta.

Ponerse en el pellejo de Clara Luz Roldán por estos días, es casi imposible porque no podemos imaginar ni sus sufrimientos ni sus dolores ni sus ganas de vivir. Por ella, por mi terruño, y por Colombia que requiere gobernantes curtidos en la brega y que conozcan en carne propia lo que tantos otros compatriotas deben sufrir, ella es un ejemplo y un faro en medio de esta tempestad   socioeconómica y política que nos pretende volver a sobrecoger por los cuatro costados.

Escuche Gustavo al maestro Alvarez Gardeazábal