La imagen del sonriente papa Francisco vuelve a imponerse entre las preferencias de los consumidores de los calendarios adquiridos en las ventas callejeras, sin el repudiado IVA carrasquillesco, para el año 2019, que está a la vuelta de la esquina.
El sumo pontífice aparece vistiendo los atuendos típicos del llamado país paisa: sombrero aguadeño, carriel jericoano y poncho de rayas, y nos encima este mensaje de su puño y letra: “Para conseguir la paz se necesita valor, mucho más que para hacer la guerra”.
Los ignotos impresores del apetecido almanaque, que está listo para debutar el martes 1 de enero, no tuvieron la precaución de darle crédito al autor de la fotografía del “¨Papa maicero”, circunstancia que los deja expuestos a una demanda. Cabe anotar que, por el empleo de gráficas sin permiso previo, pululan las querellas en las redes sociales.
La foto descrita, tomada seguramente el 9 de septiembre de 2017, durante la fugaz visita pontificia a Medellín, en el marco del memorable periplo por nuestro país, ha alborotado el regionalismo, porque al máximo líder de la cristiandad le sentó muy bien el indumento del prototipo antioqueño. (Lea la columna).