Contracorriente: Necesaria la oposición, oposición seria  

Por Ramón Elejalde Arbeláez 

En ejercicio de sus facultades presidenciales el doctor Gustavo Petro Urrego, lo obvio, lo lógico, es la existencia de una oposición que a futuro se convierta en opción de poder. Así funciona una democracia de partidos como la nuestra. Reitero algo que ya he dicho y citando en otros artículos, para poder elevar una cometa se requiere de cola. La oposición es connatural al ejercicio democrático del poder. 

El presidente Petro ha venido haciendo propuestas en forma permanente. No existe foro nacional o internacional donde no haga planteamientos de un profundo contenido y con las cuales el ciudadano puede estar o no de acuerdo. La respuesta a planteamientos serios obliga a la oposición a responder igualmente con altura, respeto y solidez en el contenido. Recientemente el doctor Petro Urrego pronunció un lúcido, profundo y novedoso discurso en las Naciones Unidas que merecieron respuestas variadas de los colombianos. Algunos alabaron su intervención y la catalogaron de histórica, otros le reconocieron el valor de su dicho y no faltaron las descalificaciones salidas de tono, amén de quienes discreparon con seriedad y argumentos del contenido del discurso. El debate, para que pueda ser constructivo para la nación, debe ser argumentado y con elevados intereses. Así se pudo observar en algunos, pero lamentablemente no faltaron las respuestas bastas y salidas de tono. Andrés Pastrana dijo en un Twitter: “¡Vergüenza! Petro se declara en la ONU como el gran capo defensor de la cocaína”. Por su parte Francisco Santos afirmó a la revista Semana que lo dicho por Petro en las Naciones Unidas era “una sarta de pendejadas y estupideces». Finalmente, Enrique Peñalosa en una red social expresó que el discurso de Petro “es vergonzoso para Colombia, es arrogante, dice falsedades, insulta a otros países. Ese populismo le sirve en campaña en Colombia, pero a nivel internacional no es serio”. Queda la sensación que ni Pastrana ni Santos escucharon o leyeron el discurso del presidente y que Peñalosa lo pudo leer, pero no lo entendió o que simplemente los tres lanzaron frases para la galería sin hacer un estudio y una crítica seria al contenido del mismo. Creo que así la oposición a Petro pierde respetabilidad 

Obvio que la oposición hoy en Colombia no está representada solamente por los personajes citados. Yo diría que en gran medida los más poderosos medios de comunicación son el bastión opositor al Gobierno. En algunos de ellos también existe mezquindad al pretender manipular con la desinformación a la opinión pública. A los lectores, oyentes o televidentes de estos medios, que buscamos en ellos información veraz, oportuna e imparcial, nos están todos los días alejando de su nicho. La pasión los tiene obnubilados e irrespetando frecuentemente a sus seguidores. Yo personalmente me vi obligado a migrar a W Radio, donde por lo menos existen periodistas para todos los gustos y sabores.  

Colombia reclama oposición contundente y sólida y medios de comunicación imparciales y veraces, donde todas las expresiones tengan espacio.