
Por Emilio Alberto Restrepo*
Revista Cronopio
Más allá de los escándalos que haya propiciado esa horda de escritores alebrestados y ávidos de gloria.
Por encima del impacto mediático que pudieron haber tenido al enfrentar al canon y las instituciones en la época de su vigencia.
Independiente de las contradicciones que los llevaron a enquistarse en el establecimiento que tan duramente cuestionaban y que enfrentaron de manera irreverente, iconoclasta y en ocasiones recurriendo a la violencia física y verbal.
Por encima de opiniones y titulares de prensa, o de enfrentamientos con escribanos católicos o con personajes embalsamados de la política y la cultura tradicionales, el Nadaísmo fue por encima de todo un movimiento literario, además de publicitario, que trató de sentar un precedente en lo único que queda para la posteridad de movimientos como este: la letra escrita, el texto publicado, el artículo comentado y leído, el poema glosado, el cuento sometido a cuidadosa disección.
Es cierto que no siempre el veredicto ha sido favorable, ni los textos han sido universalmente aceptados, ni hay unanimidad en cuanto a la valoración del acierto de los versos y las prosas, pero los escritos están allí, a la vista de todos, para someterse al escrutinio del gusto, de las academias y de la historia.
Y como a los movimientos literarios, sean vanguardias verdaderas o no, hay que evaluarlos con el rigor que da la lectura en sus diversas capas, para ver si en sus figuras se logran constituir imágenes que capturen el instante de lo bello más allá de lo simplemente ingenioso, traemos a colación esta colección desordenada y arbitraria de muchos de los escritos más conocidos de los integrantes que quedaron matriculados en este movimiento. Aclaramos: no sin controversias, llenos de altibajos y sinrazones, denostados unos, aclamados otros, mencionados todos, olvidados la mayoría. Además, incluidos algunos que ni sabían que eran nadaístas, muy a su pesar.
A los hechos nos atenemos, y las letras son los hechos de la literatura, más allá del grito y el mito, por encima de la blasfemia, superando los sacrilegios y las confrontaciones con las instituciones inamovibles que de inmediato se les enfrentaron y los combatieron.
Ahí están para el escrutinio de la historia, para el disfrute de las generaciones para las cuales este «ismo», como tantos otros, suena ya añejo, desvencijado o derruido en su propia decadencia; o por el contrario, digno de una resurrección que invite a escarbar en los sótanos telarañosos de su desmemoria.
Sin más comentarios ponemos a consideración de los lectores este cúmulo de anarquía, de chispazos e ingenio, de provocaciones, de metáforas afortunadas y de las otras, de irreverencias gratuitas o justificadas. En fin, que los textos se defiendan, ya que sus autores no pueden hacerlo.
Gonzaloarango había escrito manifiestos en papel higiénico, asunto que muchos interpretaron más allá del simbolismo y se lo tomaron literalmente para referirse a la calidad de su literatura. Desde su pedestal, desde su rincón, desde sus honduras o recovecos, con aciertos o sin ellos, estos textos están ahí para que cada cual los acoja como pueda, los disfrute o los critique, se los goce o los desprecie; ya los autores habitan el silencio y a los críticos les son más indiferente que nunca. Quién sabe si alguna pequeña joya está brillando bajo el musgo de lo aparente.
Ahí les quedan, hagan con ellos lo que buenamente les parezca y si creen que vale la pena gozárselos, aprovechen, ahora que pueden. Y no les teman, son más inofensivos de lo que parecen.
Sobre Emilio Restrepo
*Emilio Alberto Restrepo. Médico, especialista en Ginecoobstetricia y en Laparoscopia ginecológica (UPB, UdeA, CES, respectivamente). Profesor, conferencista de su especialidad. Autor de cerca de veinte artículos médicos. Ha sido colaborador de los periódicos La Hoja, Cambio, El Mundo, Momento Médico, Universocentro, Revista Cronopio, Laterales Magazine y Ficción la Revista. Ha publicado novelas, colecciones de cuentos, libros de pedagogía y ensayo literario. Ganador y finalista en concursos de poesía, cuanto y novela. Autor de cerca de 25 libros. En su producción se destacan novelas de asuntos médicos y hospitalarios, novelas y cuentos de género negro y temática urbana, libros infantiles, pedagógicos y de ensayo literario. Con la Editorial UPB ha publicado, desde 2015, seis novelas de su personaje, el detective Joaquín Tornado. Sus últimos libros, la colección de cuentos «Un hombre solo y mal acompañado» y la novela «Medicina bajo sospecha», con editorial CES.
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